Cebolla dulce: Sintomatología de patologías en cebolla

Enfermedades en horticultura. Antecedentes

El diagnóstico de enfermedades de los cultivos se trata de un arte y una ciencia. Las enfermedades producen síntomas que son los principales indicadores de diagnóstico de campo. El proceso de diagnóstico (es decir, el reconocimiento de síntomas y signos), es inherentemente visual y requiere juicio intuitivo así como el uso de métodos científicos. Existe un amplio margen para la identificación de enfermedades de las plantas en el área de agricultura y horticultura.

Hay una necesidad de diseño de un sistema de visión artificial que automáticamente reconozca, clasifique y detecte cuantitativamente las enfermedades de las plantas. Muchas enfermedades presentan síntomas generales que son causados por diferentes patógenos producidos en hojas, frutos, tallo / tallo, raíces, etc. Las enfermedades de las plantas son causadas por bacterias, hongos, virus, nemátodos, etc., de los cuales los hongos son responsables para una gran cantidad de síntomas de enfermedades en plantas.

Los agricultores están actualmente preocupados por los enormes costes involucrados en estas ocupaciones. La identificación y clasificación automática de enfermedades basadas en sus síntomas particulares son muy útiles para los agricultores y también para los científicos agrícolas.

La detección de enfermedades es un desafío importante en horticultura / ciencia agrícola.

Muchas patologías producen síntomas, que son los principales indicadores en el diagnóstico de campo. Además, en algunos países en desarrollo, los agricultores pueden tener que recorrer largas distancias para contactar a los expertos, esto hace que consultar a los expertos sea demasiado costoso. La detección automática de enfermedades en plantas es esencial, ya que puede resultar beneficioso para monitorear grandes campos de cultivos, y así automáticamente detectar los síntomas de las enfermedades tan pronto como aparezcan en la planta.

Figura 1. Recolección de cebolla dulce Allium cepa L.

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Principales enfermedades en cebolla dulce

Varias enfermedades fúngicas de la cebolla dulce producen pérdidas significativas a los productores cada año en Georgia. La pudrición del cuello por Botrytis, causada por el hongo Botrytis allii, puede ser transmitida por el suelo o transmitido por semillas. La pudrición del cuello por Botrytis es predominantemente una enfermedad postcosecha y es la más enfermedad devastadora de las cebollas dulces en Georgia. Mancha púrpura, causada por el hongo.

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Alternaria porri y el tizón de la hoja por Stemphyllium, causado por el hongo Stemphyllium vesicarium, son patógenos foliares de las cebollas dulces y reducen el rendimiento y el tamaño del bulbo de cebollas infectadas. Estas dos enfermedades son comunes en la mayoría de los años en Georgia y pueden causar graves pérdidas. La raíz rosada, causada por el hongo Phoma terrestris. Esta enfermedad se transmite por el suelo e infecta las raíces de las cebollas. Aunque la raíz rosada no pudre los bulbos de cebolla, la enfermedad puede causar pérdidas importantes.

Las cebollas y el ajo son las formas cultivadas más populares de la familia Alliaceae, aunque muchas otras especies de Allium se cultivan como alimento y como cultivos ornamentales. los La cebolla de bulbo (Allium cepa L.) es la especie más cultivada del género Allium, y se cultiva desde Escandinavia hasta los trópicos húmedos, aunque la gran mayoría de la producción se produce en regiones templadas y subtropicales (Goldban 2005).

Según las estadísticas de la FAO, las cebollas son superadas sólo por los tomates en valor de cultivos de hortalizas cultivados en todo el mundo. De hecho, casi todas las culturas del mundo consumen cebollas.

La parte comestible de la cebolla y el bulbo de ajo consiste en hojas expandidas y escamas. En el ajo, los tejidos de almacenamiento del bulbo son hojas sin cuchillas especialmente modificadas, llamadas "escamas de bulbo". En cebolla, las vainas hinchadas externas del bulbo derivan de hojas, mientras que las internas son escamas de bulbo (Brewesder 2006). La asociación entre las escamas y las hojas del bulbo son especialmente importantes en el desarrollo de muchas bacterias. Las infecciones comienzan en las hojas y a menudo viajan de ellas al bulbo.

Los patógenos causan daño a las cebollas y el ajo durante sus etapas de desarrollo. Cuando las semillas de cebolla germinan, el cotiledón emerge en forma de "rodilla" o "bucle", con ambos extremos en el suelo. El extremo de haustoria luego se saca del suelo para formar una forma de "bandera" o "látigo". La primera hoja verdadera emerge de un poro que se forma cerca de la base del cotiledón, y las hojas subsiguientes emergen del centro de la planta a través de poros similares en la base de la siguiente hoja más vieja. El proceso de desarrollo es importante en la progresión de la enfermedad en la cebolla y la pudrición del cuello dentro de la planta. El verdadero tallo es un cono aplanado en la base del bulbo. Las raíces irradian desde esta placa basal.

Las cebollas normalmente se propagan a partir de semillas, se plantan directamente en el campo, aunque también se utilizan conjuntos de cebollas y trasplantes. El ajo se ha propagado vegetativamente durante milenios, mediante la plantación de clavo. La propagación vegetativa da como resultado problemas de manejo de enfermedades. La producción comercial de ajo sigue dependiendo sobre la propagación vegetativa, aunque se han desarrollado semillas verdaderas (Etoh et al. 1988, Pooler y Simon 1994).

Las enfermedades bacterianas de las cebollas son de gran importancia económica y se producen pérdidas en el campo, en el transporte y en el almacenamiento. Las pérdidas ocurren en el campo, reduciendo el rendimiento y calidad. Las pudriciones también pueden desarrollarse durante el transporte y el almacenamiento. Cualquier nivel de infección bacteriana la volverá imposible de vender. A menudo, las mayores pérdidas financieras ocurren cuando los bulbos de cebolla parecen libres de enfermedades en la superficie, pero cuando se cortan para abrirlos, existe alguna bacteria que se provoca una infección que puede dañar o decolorar una o dos escamas dentro de la cebolla.

Si bien los consumidores pueden quejarse si se encuentran cebollas con este tipo de infección en cebollas para consumo fresco, son de especial preocupación para el procesamiento, ya que los procedimientos de procesamiento no pueden clasificar eficazmente aros o piezas de cebolla descoloridas.

Debido a esto, los procesadores pueden rechazar camiones cargados de cebollas si se encuentra este síntoma, o negarse a comprar cebollas de un campo o productor en particular.

Las especies de bacterias se han asociado con pudriciones, necrosis y tizones de la cebolla, ajo, puerro y cebollino como patógenos primarios o como colonizadores secundarios después de una infección por patógenos fúngicos son Botrytis spp., Aspergillus niger, Fusarium oxysporum f. sp. cepa y Alternaria porri.

Enfermedades bacterianas en cebolla

Las enfermedades bacterianas se desarrollan normalmente durante los períodos húmedos y prefieren temperaturas cálidas.

Piel resbaladiza

La enfermedad es causada por Burkholderia gladioli pv. alliicola (anteriormente Pseudomonas gladiolos pv. alliicola). Esta enfermedad es un problema en el sur de Estados Unidos y otras áreas con climas cálidos, y también se ha observado en regiones templadas. La cosecha, a menudo no hay síntomas externos de la enfermedad y los bulbos de cebolla deben cortarse para detectar síntomas. Los bulbos afectados pueden no ser comercializables, especialmente para su procesamiento. B. gladioli no es un problema en otros cultivos de Allium.

Síntomas

En el campo, las plantas de cebolla infectadas pueden tener una o dos hojas marchitas en el medio del racimo de hojas. Más tarde, las hojas marchitas se vuelven de color amarillo claro a blanquecino y las puntas mueren. Las las hojas más jóvenes generalmente permanecen verdes. Los bulbos de estas cebollas suelen ser suave y acuoso. Cuando se aplica presión a la base del bulbo, las escamas podridas se deslizan hacia afuera a través del cuello, lo que sugiere la razón del nombre común (Tesoriero et al. 1982).

En muchos casos, la enfermedad progresa lentamente y los bulbos afectados aparecen enfermedad libres en la cosecha, hasta que se cortan. Los cuellos de estos bulbos pueden ablandarse, después de lo cual la pudrición se propaga desde el cuello y las escamas internas de los bulbos de la enfermedad son marrones y empapados de agua, y los bulbos se vuelven blandos y podridos (Tesorir et al. 2015).

Organismo causal

Figura 2. La porción comestible de la cebolla y el bulbo de ajo consiste en hojas expandidas escamas.

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El agente causal de la piel resbaladiza, B. gladioli, forma un difusible, no fluorescente, un pálido pigmento amarillo a amarillo verdoso en agar nutritivo-dextrosa y medio King's B. Es un bastón móvil Gram-negativo que tiene de uno a varios flagelos polares (Burtholder, 2002).

Ciclo de la enfermedad

La piel resbaladiza ocurre con frecuencia durante las temporadas con altas precipitaciones o en campos que son muy irrigado. La infección generalmente ocurre mientras el cultivo está creciendo activamente, en breve antes de la cosecha o cuando se cubren las cebollas. El patógeno se transmite por el suelo y es probablemente transferido a las hojas por salpicaduras de agua.

La infección de los tallos de las semillas y hojas se ha notificado en Hungría e India (Tesoriero et al. 1982). Las heridas en las hojas pueden ser puntos de entrada importantes para el patógeno. Los bulbos maduros son muy susceptibles a las infecciones. La acumulación de agua en el cuello del la cebolla también puede promover la infección. Las bacterias entran a través del tejido foliar y se propagan hacia abajo de la hoja a la altura del bulbo correspondiente, luego progresa hacia abajo de la escala a la base del bulbo antes de extenderse por todo el bulbo.

Las temperaturas altas y lentas el secado de los bulbos aumenta la infección (Tesoriero et al. 1982). Las bacterias crecen en el rango de 5-41o C, con una temperatura óptima de 30o C. Los bulbos infectados comienzan a pudrirse en cuatro semanas cuando se almacenan a 25o C, pero no a 15o C. En almacenamiento, la enfermedad puede tardar hasta tres meses en destruir una cebolla completamente (Kishun y Swarup 1981).

Piel agria

La enfermedad es causada por Burkholderia cepacia (también conocida como Pseudomonas cepacia), es una enfermedad grave del procesamiento de cebollas; los brotes severos pueden resultar en el rechazo de lotes enteros. Sour Skin se descubrió por primera vez en 1950 en Nueva York, donde se ha convertido prevalente (Burkholter 2009). Esta enfermedad afecta solo a las cebollas.

Síntomas

En el campo, se observa ablandamiento en la base de la hoja y se desarrolla una podredumbre a partir de pequeñas áreas para cubrir la escala externa de la cebolla. Las cebollas afectadas suelen tener 1 o 2 tostadas o hojas marrones parcialmente podridas. Más tarde, se desarrolla una pudrición acuosa en la base de la hoja en el bulbo del tallo.

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