Cómo seleccionar el híbrido de maíz

1. Introducción
2. Los híbridos y su clasificación
3. Elección de los híbridos

1. Introducción

El maíz es el cultivo más importante del país, no sólo por la gran superficie cultivada, sino porque forma parte de la vida y la tradición de la población. Para cubrir las necesidades internas se precisan alrededor de 32.5 millones de toneladas de grano de maíz al año. La producción media anual de los últimos años es de unos 23.5 millones de toneladas, por lo que se requiere incrementar la producción de maíz. Casi todos los estados lo cultivan, pero en algunos de ellos no se obtienen los rendimientos necesarios. Por este motivo, se recomienda el uso de híbridos con el objetivo de obtener mayores cosechas, aunque no podemos olvidar que en el rendimiento de un cultivo influyen otros muchos factores.

2. Los híbridos y su clasificación

Un híbrido de maíz es el resultado de la mejora genética de la especie mediante el cruce de dos líneas que poseen características de interés. Su obtención está considerada como uno de los primeros logros en el mejoramiento de las plantas. Además, ha servido de base para la utilización del vigor híbrido en otros cultivos. La creación de híbridos de alta productividad se basa en aprovechar el fenómeno de la heterosis, que se produce al cruzar dos líneas puras homocigóticas. La heterosis, o vigor híbrido, es un proceso en el cual el cruce de dos líneas puras produce un individuo mejorado con respecto a sus predecesores.

Esta mejora se puede manifestar como características determinadas que se buscan para el cultivo, como pueden ser, entre otras:

• Mayor tamaño
• Aumento del rendimiento
• Precocidad
• Resistencia a plagas y enfermedades
• Cantidad y calidad de granos
• Mayor vigor de planta
• Mejor adaptación a situaciones de estrés
• Resistencia al acame

Varios autores señalan que la hibridación ha sido uno de los métodos más exitosos para aumentar la capacidad de rendimiento. Indican además, que el uso de híbridos en poblaciones mejoradas ofrece un mayor número de alternativas para encontrar rendimientos superiores que cuando se parte de poblaciones originales.

Clasificación

Los híbridos comerciales de maíz pueden clasificarse y caracterizarse por el número de líneas puras que intervengan en su formación, destacando los tipos siguientes:

• Híbridos simples. Se obtienen por el cruzamiento de dos líneas puras. Presentan buena uniformidad en tamaño, tipo de planta y altura de la espiga. También, alta dependencia de las condiciones externas para la óptima expresión de sus características y un mayor rendimiento potencial que otros cruces. La principal dificultad de estos híbridos está en la multiplicación de semilla, por su baja producción.
• Híbridos dobles. Obtenidos por el cruzamiento de dos híbridos simples entre sí. Estos híbridos presentan plantas menos uniformes en cuanto a tipo, altura y aspecto que la de los híbridos simples, pero con una mayor producción de semilla.
• Híbridos de tres líneas. Procedentes del cruzamiento de un híbrido simple con una línea pura. La uniformidad de plantas es casi igual a la que presentan los híbridos simples, pero son más rústicos que éstos y tienen mejor producción de semilla.
• Híbridos sintéticos. Producidos por una semihibridación, sin uso de líneas auto fecundadas. Pueden ser utilizados como semilla durante varios años sin mayores pérdidas.

3. Elección de los híbridos

La cuestión más importante que suele plantearse un productor de maíz es el híbrido que va a comprar. La respuesta no es sencilla, ya que no existe el híbrido perfecto. Hay una gran diversidad de semillas en el mercado y todas ofrecen ventajas e inconvenientes. En México, existen más de 67 empresas de semillas y más de 380 híbridos de maíz. Por lo tanto, la elección no es fácil y el productor debe meditar bien esa elección antes de realizar la compra. En este sentido, existen varias formas de conseguir información para ver cuál es el híbrido que mejor puede adaptarse a su campo y a las características de su región. Éstas pueden ser:

• Buscar información general sobre las semillas de posible interés y también sobre las empresas que las comercializan. Hay empresas internacionales que dominan el mercado, pero también existen empresas regionales y locales. La información se puede ver en folletos, revistas y periódicos, aunque actualmente es internet el medio informativo más rápido, cómodo y global.
• Asistir a eventos y charlas de promoción de distribuidores de semillas. Allí se pueden encontrar híbridos con diferentes características y también las últimas novedades que se presentan. Por esto, es importante acudir a estos eventos, donde se pueden encontrar y conocer profesionales del sector con los que hablar del tema.
• Preguntar y escuchar a amigos, vecinos, técnicos u otros productores sobre diversos aspectos relevantes como los rendimientos, características y comportamientos obtenidos con el híbrido cultivado en la región.
• Mirar datos estadísticos de interés de determinados híbridos en organismos gubernamentales, instituciones de investigación, universidades, asociaciones de productores, empresas de semillas, etc. Los datos más importantes a revisar son:
• La humedad en el momento de la cosecha, ya que la humedad es un parámetro que influye en el peso del grano. Los rendimientos de todos los híbridos evaluados suelen estar referidos al 14 % de humedad.
• La superficie cosechada es fundamental, para poder relacionarla con la producción obtenida. Si no, los datos no reflejarán los rendimientos reales.
• El número de años o ciclos agrícolas evaluados es también importante, ya que cuantos más años hayan sido evaluado mayor confianza ofrecerá el híbrido.
• Las distintas zonas de cultivo evaluadas darán respuesta a la adaptabilidad del híbrido a diferentes regiones y condiciones climáticas.
• Los costes de producción deben ser relacionados con el rendimiento del cultivo. A veces, estos costes indican una alta inversión, no obteniendo en estos casos rentabilidad del mismo.

De este modo, para elegir el híbrido adecuado se requiere de información comercial, de vecinos o amigos, de revisar datos estadísticos, etc., pero también es importante el trabajo de seguimiento e investigación realizado en campo. El productor puede probar de forma experimental la siembra de algún híbrido nuevo, aunque en una pequeña superficie (1-2 hectáreas), nunca sembrar toda la superficie con un solo híbrido por si existieran problemas. Estas pruebas pueden ser cruciales, ya que existen variables en el manejo del cultivo y del clima que pueden influir significativamente en el rendimiento. Si los híbridos evaluados no ofrecen un comportamiento satisfactorio al productor serán descartados, seleccionando los que alcancen un buen nivel de rendimiento en sus condiciones, especialmente las climáticas, así como frente a enfermedades y a situaciones de estrés.

Finalmente, existen varios motivos que dan lugar a una elección errónea del híbrido por parte del productor. Estos motivos suelen ocurrir con frecuencia, en los que se compra un determinado híbrido porque es nuevo, porque fue el que más rendimiento ofreció en la región, porque le va bien a mi vecino, porque es el más publicitado, porque es el que más se vende, etc.

En resumen, elegir el híbrido adecuado para un productor es una tarea difícil, que requiere de un análisis previo de la información y de pruebas en campo. Existen muchas influencias en el entorno que pueden dar lugar a una elección equivocada. Por eso es recomendable dejarse asesorar por personal técnico bien informado y cualificado, siempre en función de las condiciones de la parcela de cultivo.