Análisis de los micronutrientes en suelos agrícolas. Kit de nutrientes para agricultura e invernadero. LaMotte 5938-02

Medidor de los principales micronutrientes en suelo: aluminio, amoníaco, calcio, cloruros, hierro, magnesio, manganeso, nitrógeno y sulfato.

50 pruebas para cada parámetro.

Robusto kit de campo que contiene módulos de pruebas individuales y manuales para ayudar y complementar estudios de la ciencia del suelo. Cada módulo de prueba individual incluye instrucciones completas y todos los aparatos y reactivos necesarios, para realizar 50 pruebas de cada elemento (450 test).

Métodos de preparación, extracción y técnicas de filtración y procedimientos desarrollados específicamente para el análisis de los nutrientes del suelo. Módulos de prueba individuales para nueve factorees de análisis de suelo:

Aluminio (5-150 ppm)

Amoníaco (5-150 ppm)

Calcio (150-2800 ppm)

Cloruros (25-500 ppm)

Hierro (5-125 ppm)

Magnesio (5-150 ppm)

Manganeso (4-40 ppm)

Nitrógeno (1-50 ppm)

Sulfato (50-200 ppm)

Los cloruros están presentes en pequeñas cantidades en casi todos los tipos de suelos. El cloruro en grandes cantidades puede llegar a ser tóxico para el crecimiento de los cultivos, además de poder retrasarlo.

Una falta de calcio en el suelo raramente limita el crecimiento de las plantas, sino que ayuda a proporcionar un equilibrio favorable entre los distintos constituyentes del suelo que afectan a la fertilidad.

En un suelo de cultivo fértil es normal encontrarse con niveles bajos de amoniaco, a menos que se haya añadido recientemente un fertilizante nitrogenado en formas diferentes al nitrato.

En los suelos que están bien drenados y ventilados los nitritos se encuentran en cantidades muy pequeñas. Un exceso de nitritos, tóxicos para los cultivos, se puede dar en suelos muy poco ventilados y donde hay grandes cantidades de nitratos, ya que parte de la concentración de nitratos se puede descomponer para dar lugar a los nitritos. Los niveles altos de nitritos de nitrógeno, por lo tanto, indican una condición del terreno que puede ser poco favorable para la formación de nitratos y tóxica para las plantas. Los terrenos que tienen niveles bajos de nitritos tienen que tratarse con cal dolomítica o fertilizantes, como el sulfato de potasio magnesio, que contiene grandes cantidades de magnesia. Los suelos que tienen niveles altos o muy altos de magnesio y los niveles de calcio bajos tienen que ser tratados con yeso o cal con mucho calcio con el fin de prevenir la deficiencia de calcio debida al exceso de magnesio.

El manganeso está presente en todos los suelos en pequeñas cantidades, principalmente en combinaciones no solubles. En algunos suelos calcáreos o ácidos casi no hay manganeso en forma activa, y algunos cultivos no pueden obtener el manganeso que necesitan de esa forma. Como resultado el crecimiento de los cultivos es deficiente y puede aparecer clorosis.

La mayoría de los suelos contienen hierro en suficientes cantidades como para satisfacer las necesidades de la mayoría de los cultivos. Una deficiencia de hierro puede aparecer algunas veces en los suelos alcalinos, y se puede notar por la clorosis (tono amarillento) de las plantas. En los suelos ácidos puede haber niveles altos de hierro.

En los suelos ligeramente ácidos o alcalinos, el aluminio está en combinaciones inertes que no tienen efecto en el crecimiento de las plantas. A niveles más altos de acidez, el aluminio se vuelve activo, lo que significa que es capaz de combinarse como sales solubles, y por lo tanto, puede ser tóxico para el desarrollo de muchas plantas. Los niveles muy altos de aluminio es un índice de suelo ácido en el que los cultivos sensibles al ácido no pueden crecer. Un nivel medio es normal, especialmente con hierba, maíz, avena, patatas y tabaco. Un nivel bajo es lo más deseable excepto pata los cultivos tolerantes al ácido.

Los sulfatos están normalmente presentes en casi todos los suelos. A menos que esté presente en cantidades excesivas, los sulfatos no son dañinos para las plantas. Niveles muy altos pueden indicar una adición reciente de sulfuro o compuestos de sulfato recientes al suelo.