Alemania-vacas locas: verdes y spd aprueban proyecto de ley para veto piensos de carne

Los grupos parlamentarios de Los Verdes y el Partido Socialdemócrata alemán (SPD) acordaron el proyecto de ley para la prohibición de piensos cárnicos, mientras la alarma ante el mal de las vacas locas ha provocado una caída de hasta el 70 por ciento en el consumo de carne.

El veto, que se extenderá a la alimentación de todas las especies destinadas al consumo humano, se pretendía aplicar en un principio por un reglamento de urgencia, pero la constatación de que no existe base jurídica para dictarlo ha obligado a dar marcha atrás al gobierno roji-verde.

El proyecto de ley será debatido primero en el Bundestag (parlamento) y después pasará a la cámara de representación territorial, el Bundesrat, para su aprobación el próximo viernes previsiblemente.

Hasta la puesta en práctica del veto, los fabricantes de piensos se han comprometido a no vender ningún alimento a base de harinas de carne a los agricultores.

La alarma tras la aparición de los dos primeros casos de vacas locas nativas en Alemania no sólo se trasluce en las decisiones algo atropelladas del gobierno y sus rectificaciones sino también en la actitud de los consumidores.

El diario ''Die Welt'' informa de que el consumo de carne ha caído de forma drástica y en algunos establecimientos se registra hasta el 70 por ciento menos de ventas, por lo que muchos negocios hablan de catástrofe.

El sindicato de Alimentación y Hostelería ha indicado que la crisis ante el temor a la encefalopatía espongiforme bovina podría provocar una pérdida de 10.000 puestos de trabajo en la industria de piensos, en el sector de tratamiento de la carne, mataderos, explotaciones ganaderas y carnicerías.

Por ello los responsables de algunas cadenas alimentarias se plantean la posibilidad de realizar test de detección rápida del EEB mientras el gobierno no aplique de forma generalizada estos análisis.

Ante las pérdidas que registrarán los agricultores, la Unión Cristianodemócrata (CDU) ha apuntado la posibilidad de que este sector reciba ayudas económicas estatales.

El presidente de la comisión para alimentación y agricultura del Bundestag, el cristianodemócrata Peter Harry Carstensen, se mostró partidario de que se destine 300 millones de marcos (unos 130 millones de dólares) del presupuesto para respaldar a los agricultores afectados.