La Comisión Europea no emprenderá acciones inmediatas contra el Gobierno de Estados Unidos (EEUU) por conceder a sus productores de oleaginosas ayudas que distorsionan el comercio internacional, informaron fuentes comunitarias.
Bruselas considera que estos apoyos ''han tenido efectos significativos'' en los precios de oleaginosas (soja, colza y girasol), pero ''no tiene evidencias suficientes'' para concluir que provocan ''daños serios'' al sector comunitario.
El Ejecutivo comunitario comenzó una investigación tras una queja contra los subsidios estadounidenses, presentada en enero por la Asociación Europea de Productores de Oleaginosas (EOA), formada por entidades sectoriales de España (Confederación de Cooperativas Agrarias Españolas), Alemania, Reino Unido, Francia y Suecia.
La EOA criticaba varios tipos de apoyos: préstamos sin derecho a reclamación por impago (loan rates); créditos que implican una ayuda equivalente a la diferencia entre el precio del mercado y una tasa fijada por el Gobierno de EEUU (marketing loans); ayudas directas y pagos anticíclicos.
Una vez terminada su investigación, la Comisión Europea informó a los Estados miembros de que no es posible una denuncia inmediata del régimen estadounidense.
Señaló, no obstante, que vigilará la evolución del mercado de oleaginosas y que presentará un informe antes de finales de 2005
Los productores denunciaron que las subvenciones concedidas por EEUU, en el marco de la ''Farm Bill'' -ley agrícola que entró en vigor en 2002- ''distorsionan el comercio y causan un grave perjuicio al sector europeo''.
Estas medidas han supuesto un desembolso por parte del Gobierno estadounidense de 10.000 millones de dólares (9.433 millones de euros) y han incrementado las importaciones de los operadores estadounidenses, con el consiguiente daño para el sector comunitario, según la queja de la EOA.
El sector europeo estima que estas ayudas les han causado pérdidas que oscilan entre los 500 y los 700 millones de euros.
La EOA afirmó que ''si bien la Comisión Europea reconoce los fundamentos de la queja, no ha emprendido acción, por lo que los productores europeos seguirán desprotegidos'', según un comunicado.
La UE produjo 14 millones de toneladas de oleaginosas en el período 1999-2002, por valor de 3.000 millones de euros a precios corrientes.