El Consejo de Ministros de la UE ha aprobado un acuerdo con Canadá para el comercio de vinos y bebidas espirituosas, con el que se protegerán más ciertas denominaciones europeas como Málaga y Jerez, informaron fuentes comunitarias.
Los Quince ratificaron, por procedimiento escrito, dicho compromiso en el que se establecen condiciones más favorables para el comercio de vino y bebidas entre la UE y Canadá.
Según el nuevo acuerdo, las indicaciones geográficas de vino y bebidas espirituosas de cada una de las dos partes será protegido en el territorio del otro mercado.
Además, se aplicarán nuevas reglas de certificación según las cuales ninguna de las partes podrá imponer un sistema más restrictivo que el aplicado una vez que entre vigor el nuevo acuerdo.
El convenio prevé que una veintena de nombres de vinos y bebidas de origen europeo -que los productores de Canadá usaban como ''genéricos'' o ''semigenéricos''- dejen de emplearse para caldos canadienses y sólo se usen para productos de la UE.
Esta medida se aplicará en tres etapas y en una primera fase ''inmediata'' dejarán de utilizarse en Canadá términos como Burdeos, Chianti, Marsala y Málaga; otras menciones, como Borgoña, se suprimirán para los vinos canadienses en diciembre de 2008.
Un tercer grupo de nombres dejará de emplearse a finales de 2013 y entre ellos está el Jerez, Porto y Champagne.
El texto incluye una lista positiva y otra negativa de prácticas enológicas, para las que habrá un reconocimiento mutuo, y en el caso de que haya nuevas técnicas ''deberán cumplir un número de requisitos determinados para garantizar la calidad y la protección del consumidor.
El acuerdo prevé un comité conjunto y un mecanismo de arbitraje para nuevos métodos de obtención de vino y bebidas que puedan suscitar conflicto