ESPAÑA 30/09/2003
El sector hortofrutícola lamentó que las concesiones a Marruecos para renovar el protocolo agrícola del Acuerdo de Asociación con la UE tengan que ser soportadas por las frutas y hortalizas españolas, en concreto, por el tomate que vuelve a ser ''moneda de cambio'' en las negociaciones.
El comisario de Agricultura, Franz Fischler, anunció que se ha alcanzado un consenso sobre los puntos más importantes de la negociación y explicó que Marruecos podrá introducir en el mercado comunitario 175.000 toneladas por campaña, que se ampliarían hasta 220.000 toneladas en cuatro años.
Los negociadores comunitarios y marroquíes han llegado en Bruselas un consenso sobre las exportaciones de tomate -principal producto de interés para Marruecos- y las de cereales -producto de importancia para la UE y que hasta ahora obstaculizaba un acuerdo-.
El presidente del Comité del Tomate de la Federación Española de Productores y Exportadores (FEPEX), José Hernández, insistió en que todavía no se conocen con exactitud los términos del acuerdo, pero indicó que si se mantiene el periodo de exportación que existía hasta ahora (noviembre/marzo) ''será un desastre para los productores españoles''.
Indicó que el principal problema no es el incremento del contingente, sino el mantenimiento del periodo de exportación, que coincide con la época de producción y exportación española, y concluyó que este acuerdo ha sido una concesión de la UE a los intereses de Francia.
Desde la Confederación de Cooperativas Agrarias de España (CCAE) criticaron que una vez más los cultivos mediterráneos y, en concreto, el sector hortofrutícola español es el gran perjudicado para mejorar las condiciones de exportación de otros cultivos continentales.
Denunció que esta noticia es un ''gran varapalo'' para el sector que tendrá que soportar la entrada de tomate marroquí en el calendario de producción y exportación español.
Desde la Asociación Valenciana de Agricultores (AVA-ASAJA) hicieron hincapié en que la postura de la UE es una ''nueva vuelta de tuerca'' que insiste en la discriminación de la agricultura mediterránea frente a la continental.
La política de apertura de la UE hacia Marruecos resulta ''insostenible e ignora, de nuevo, los intereses de las productores mediterráneos de los Estados miembros'', además estos acuerdos ''enmascaran una falsa solidaridad tras la que subyacen otros intereses menos altruistas'', aseguró esta organización agraria.
Fuentes de la Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG) mostraron su total rechazo a este principio de acuerdo que perjudica seriamente a los productores de frutas y hortalizas españoles, principales abastecedores de tomate del mercado comunitario.
Señalaron que con este acuerdo ''la Comisión Europea quiere utilizar a las producciones mediterráneas como moneda de cambio en los acuerdos comerciales con terceros países y favorecer a los países comunitarios con cultivos continentales, sobre todo a Francia, gran productora de cereales''.
El técnico de frutas y hortalizas de la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA), Marcos Alarcón, detalló que ''se confirma que este acuerdo estaba ya tomado hace tiempo, como nosotros ya veníamos anunciando y desmiente las declaraciones del ministro de Agricultura, Miguel Arias''.
Calificó el acuerdo de ''traumático'' para los productores de tomate españoles y señaló que ''provocará un abandono aún mayor de las explotaciones familiares dedicadas a este cultivo, ya que no recoge ningún tipo de medida compensatoria frente a las pérdidas que ocasionará en el sector''.