Los cultivos con Organismos Genéticamente Modificados (OGM) ''pueden coexistir perfectamente'' con otros tipos de agricultura en España, afirmó el representante de la Oficina de Variedades Vegetales del Ministerio de Agricultura (MAPA), José Ignacio Ortega.
Ortega expuso la producción de maíz transgénico en España como un ejemplo de compatibilidad entre OGM y otras formas de producción, durante un seminario organizado por el Comité de Organizaciones Agrarias y Cooperativas de la UE, COPA-COGECA.
El representante del MAPA indicó que actualmente se cultivan en España 58.000 hectáreas de maíz de variedades transgénicas, en autonomías como Cataluña y Aragón y que en 2004 ha incrementado la superficie de cultivo de OGM.
Remarcó que en estos momentos existe un proyecto de decreto para regular a nivel nacional la coexistencia y que el texto ha sido enviado a la Comisión Nacional de Biovigilancia, en la que participan la Administración central, las Comunidades Autónomas y Organizaciones no Gubernamentales.
Los expertos debatieron, durante la jornada del COPA-COGECA, sobre si es necesario o no una norma comunitaria sobre la compatibilidad entre OGM y otros cultivos.
La responsabilidad y el efecto económico de la coexistencia y los problemas de mezcla involuntaria de OGM con otros cultivos ''depende del sector'', según el representante del MAPA.
Ortega señaló que sembrar maíz transgénico es menos problemática a la hora de hablar de contaminación accidental de otras parcelas donde no se plantan OGM, al contrario que ocurre con la producción de colza genéticamente modificada, que no se planta en España y que hace más difícil que conviva con otros tipos de producción.
Añadió que si bien los OGM ''no resuelven totalmente el hambre del mundo, ayudan a solucionar problemas como la plaga del taladro'', concluyó.
