ESPAÑA 03/04/2004
El objetivo real de quienes reclaman una drástica apertura agrícola son los mercados de los países en desarrollo, que representan el mayor potencial importador en los próximos años, afirmó en Ginebra Peter Carl, director general de Comercio de la Comisión Europea.
Países como la India, Pakistán, Egipto, Malasia, Nigeria, Bangladesh y otro son los potenciales blancos de los agroexportadores netos, y no la Unión Europea, dijo Carl, quien recordó que los Quince importan ya más productos agrícolas que Estados Unidos, Canadá y Japón juntos.
''Sin embargo, otros países como la India dicen que no van a sacrificar la subsistencia de sus campesinos en beneficio de los agricultores de Kansas (EEUU)'', dijo el negociador europeo en referencia también al grupo de Cairns de exportadores netos agrícolas.
Carl, que participa esta semana en un reunión negociadora de la Organización Mundial del Comercio en Ginebra, negó que la Unión Europea esté frenando las negociaciones de agricultura como le reprocha sobre todo el grupo de Cairns, que incluye a varios países latinoamericanos como Brasil, Argentina, Chile, Paraguay o Colombia.
''Es totalmente absurdo cuando resulta que la Comisión ha acordado congelar el presupuesto agrícola para los próximos diez años y tendrá que acomodar con él un 50 por ciento más de explotaciones agrícolas'' por la incorporación de los nuevos miembros, señaló.
Estados Unidos mientras tanto ''va en la dirección opuesta: con la ''farm bill'' ha aumentado su apoyo al sector aproximadamente en la misma cantidad en la que nosotros reducimos la nuestra'', dijo Carl, quien agregó que mientras la UE tiende a desvincular las ayudas de la producción, los norteamericanos hacen lo contrario.
Sobre la marcha de la ronda lanzada en Doha en noviembre del 2001 y que debe terminar en principio en enero de 2005, Carl reconoció, utilizando una metáfora automovilística, que los negociadores en Ginebra tienen que poner la tercera velocidad en los meses que faltan hasta la reunión ministerial de Cancún (México), a mediados de septiembre.
''Ello permitirá a los ministros meter allí la cuarta, con lo que podríamos avanzar a velocidad de crucero hasta el final de la ronda'', dijo Carl.
El representante adjunto para el Comercio Exterior de EEUU, Peter Allgeier, señaló en otra conferencia de prensa el compromiso norteamericano de completar ''la ronda a tiempo'', es decir para el 1 de enero de 2005, y sin rebajar los ambiciosos objetivos que se fijaron en Doha.
Allgeier hizo hincapié en que ''el acceso a mercados'' (mediante la eliminación rápida de los aranceles) es el ''meollo'' de la ronda, preocupación que EEUU comparte con los grandes exportadores del grupo de Cairns.
A una pregunta sobre el efecto que podría tener la guerra en Irak sobre la marcha de la ronda, el segundo de Robert Zoellick dijo que ese conflicto ''es un elemento más en una situación internacional muy tensa'', debido a la cual ''todo el mundo debería entender la urgencia de completar un ambicioso ciclo de negociaciones''.
Allgeier coincidió con el negociador de la UE en que en la reunión de Cancún los ministros deberían estar en condiciones de tomar una decisión sobre ''modalidades'' o fórmulas de liberalización en los llamados temas de Singapur: transparencia en contratación pública, inversiones y facilitación de trámites aduaneros.
El negociador estadounidense expresó su satisfacción por el hecho de que un país como Brasil, que tiene un gran interés en las negociaciones agrícolas, haya decidido no esperar a que se supere el actual punto muerto antes de poner sobre la mesa sus ofertas iniciales en el comercio de servicios.
Argentina ha anunciado también que presentará también sus ofertas en ese último sector en los próximos días, con lo que se sumará a otros catorce países que ya lo han hecho, entre ellos Uruguay, Panamá, Paraguay, Japón, Nueva Zelanda, Canadá, EEUU, Noruega y Australia.