ESPAÑA 29/06/2004
Los ministros de Medio Ambiente de la UE no alcanzaron un acuerdo ni en favor ni en contra de la propuesta de Bruselas que pretendía autorizar la importación y el procesado del maíz genéticamente modificado ''NK603''.
Al no haber decisión del Consejo, el expediente vuelve a la Comisión para su decisión final, que se producirá ''en las próximas semanas''.
El plazo para que los Estados miembros se pronunciaran al respecto se cumplía el próximo 30 de junio.
Si se autoriza este tipo de maíz, se vendería como cualquier otro salvo para ser cultivado y para su uso alimentario, y su autorización sería para un plazo de 10 años siempre que fuera etiquetado convenientemente.
La aprobación para el uso alimentario de este maíz está pendiente de decisión, pero a través de otro cauce, ya que corresponde a los ministros de Agricultura tomar la decisión.
El expediente que examinaron los titulares de Medio Ambiente comenzó a tramitarse en el año 2000, cuando España presentó una solicitud para comercializarlo y pidió opinión a nivel comunitario.
Sin embargo la ministra actual de Medio Ambiente, Cristina Narbona, se abstuvo en la votación, junto a Bélgica, Eslovaquia, Letonia y Eslovaquia.
Dinamarca, Chipre, Hungría, Italia y Grecia votaron en contra de la propuesta, y Francia, Estonia y la República Checa, a favor.
Según Narbona, ''la posición que ha tenido el Gobierno del PP desde 1996 ha permitido que sea España la que autorice hasta doce OGM, de los que cinco variedades de maíz han tenido que ser retiradas''.
Destacó que ''la propia comunidad científica manifiesta su dificultad de ir más allá de un plazo relativamente corto en sus análisis'', y por ello ''el actual gobierno español cree que hay que acentuar el principio de precaución sobre los OGM''.
''España no puede decir con rigor que estamos en condiciones de que se aplique correctamente la normativa europea vigente para garantizar la trazabilidad de los OGM'', añadió Narbona.
Se necesitaba la mayoría cualificada de los países para que la autorización del maíz ''NK603'' hubiese sido aprobada, pero no se ha conseguido.
El anterior Ejecutivo español era favorable a la autorización de OGM ''caso por caso'' y tanto en los comités científicos y en el Consejo votaba a favor; sin embargo, en todas las reuniones a las que ha asistido un representante del nuevo Gobierno socialista, España se ha abstenido.
El maíz ''NK603'', comercializado por la empresa estadounidense Monsanto, ha sido genéticamente manipulado para resistir a un herbicida ''el glifosato'' y es uno de los OGM más utilizados en el mundo.
