Estados Unidos propone eliminar las ayudas a la exportación y otros subsidios agrícolas

Una veintena de países de la Organización Mundial del Comercio (OMC) se reúnen en Zúrich, convocados por EEUU, para intentar reducir divergencias de cara a la conferencia ministerial de Hong Kong prevista para diciembre. Ya antes de que se inicie la jornada, y en claro desafío a la Unión Europea, EEUU ha ofrecido eliminar, en cinco años, sus subsidios a la exportación y reducir en más de la mitad sus ayudas internas a sus agricultores en el marco de las negociaciones de la ronda de Doha.

Según informa el diario ''El Mundo'', la propuesta norteamericana, expresada en un artículo en el diario ''Financial Times'' por el representante de Comercio Exterior de ese país, Rob Portman, se discutirá en la reunión de ministros de Comercio en Zúrich, cuando sólo faltan nueve semanas para el encuentro clave de todos los países de la OMC en Hong Kong.

En opinión de ASAJA, estas declaraciones suponen una apuesta de última hora a sabiendas de que no será aceptada en la OMC. Por ahora, el Gobierno norteamericano mantiene su política agraria sin reformar, mientras que la UE acude a Hong Kong con una reforma sustancial de la PAC acorde con los requistos de la OMC.

EEUU tampoco ha dado ninguna muestra hasta ahora de contar con una voluntad liberalizadora tanto en materia de acceso al mercado como de competencia a la exportación o en ayudas internas, manteniendo sus pagos contracíclicos.

La agricultura es uno de los capítulos más difíciles de las negociaciones de la ronda lanzada en la capital qatarí debido, precisamente, al proteccionismo existente en el sector y a las distintas modalidades de ayudas, que sólo pueden permitirse los países ricos.

Detalles de la oferta

En su artículo, Portman ofrece eliminar los subsidios estadounidenses a la exportación para el año 2010, fecha exigida por el G20 de países en desarrollo, capitaneado por Brasil y la India, y que también ha propuesto el primer ministro británico, Tony Blair.

Portman propone, por otro lado, reducir en un 60% aquellas ayudas internas al sector que distorsionan el comercio agrícola, un 5% más que lo exigido por la Unión Europea.

Sin embargo, Estados Unidos podría mantener los llamados ''pagos contracíclicos'' a sus agricultores, que los compensan cuando bajan los precios en los mercados mundiales, lo que constituye a su vez una fuerte subvención al sector.

El conflicto entre Washington y Bruselas por los distintos tipos de ayuda que cada una de las partes conceden a sus agricultores ha impedido hasta ahora un avance significativo en la ronda de Doha, dado que otros capítulos están pendientes de que se resuelva el que todos consideran central.

Recorte de ayudas europeas Según el rotativo británico, con su nueva propuesta Estados Unidos acepta el riesgo calculado de convencer a sus agricultores de que los beneficios de la apertura de nuevos mercados a sus exportaciones serán superiores a lo que dejarán de ingresar en concepto de subsidios y ayudas internas.

Dado que la Unión Europea mantiene subsidios y aranceles superiores a los estadounidenses, la propuesta de Washington implica además mayores sacrificios por parte de Bruselas, y así el ''Financial Times'' calcula que la UE tendría que recortar en más de un 80% sus propias ayudas internas frente al 60% de Estados Unidos.

Los europeos están, sin embargo, divididos sobre las ayudas. Reino Unido, donde el peso del sector agrícola es mucho menor que en la vecina Francia, aboga por una reforma drástica de la Política Agrícola Común como parte de las negociaciones del presupuesto europeo.

Temas clave

Los 148 países de la OMC se reunirán en Hong Kong del 13 al 18 de diciembre próximos para perfilar las modalidades de liberalización comercial en agricultura, servicios y acceso a mercados para productos industrializados (NAMA), entre otros, que aparecen en los objetivos de la Ronda de Doha.

Con esa ronda de negociaciones comerciales, que tendría que terminar en teoría en 2006, se pretende que sean los países en desarrollo los principales beneficiarios de esa liberalización.

Las diferencias entre países desarrollados y en desarrollo en asuntos agrícolas, como los subsidios internos a ese sector, las subvenciones a la exportación o el acceso a los mercados, han colocado las negociaciones en una posición de punto muerto y en la que todos reconocen que sin el desbloqueo agrícola, la ronda habrá fracasado.

También divergen las posturas en el sector agrícola entre países importadores y exportadores sobre asuntos como los métodos para reducir los aranceles agrícolas o los subsidios que reciben los agricultores.