Por intermediación de la Organización Internacional del Café, OIC, el Fondo Común de Productos Básicos (CFC por sus siglas en inglés) facilitó un crédito a Honduras y Nicaragua para la rehabilitación de la infraestructura de beneficiado del sector café.
En Nicaragua participan las instituciones gubernamentales MIFIC, FCR y MARENA junto al IICA-PROMECAFE, 11 cooperativas de productores que funcionan como Intermediarias Financieras (IF´s) y una Sociedad Anónima.
El proyecto está orientado a modernizar las instalaciones de beneficiado húmedo del café, para garantizar la calidad del grano y aumentar los ingresos de los productores, impulsar en fincas cafetaleras de pequeña y mediana escala tecnologías intermedias pre evaluadas e innovadoras, que produzcan una reducción dramática en el uso de energía y de la contaminación del agua.
En 2009 se elaboraron cuatro Planes de Gestión Ambiental (PGA) y un manual para elaborar los planes.
En este mismo año se construyeron 127 nuevas plantas para el beneficiado húmedo del café, con un costo promedio de siete mil dólares por unidad.
Los beneficios húmedos están distribuidos en las zonas cafetaleras de Jinotega (60), Matagalpa (2), Nueva Segovia y Madriz (78).
Con respecto a los modelos, se construyeron 71 unidades del M1 (25-50 quintales / cosecha), 41 unidades de M2T1 (50-100 quintales / cosecha), 18 unidades del M2T2 (100-200 quintales / cosecha), y 10 unidades del M2T3 (300-600 quintales / cosecha).
Además se desarrollaron 64 eventos de capacitación, con participación de 1,100 productores (15% son mujeres), 43 maestros de obras y 124 técnicos.
Los temas de capacitación fueron: diseño de los modelos de plantas para el procesamiento húmedo de café y su funcionamiento; gestión ambiental del procesamiento y uso de los sub productos del café; manejo del cultivo del café; y, mercadeo y comercialización.
Con la construcción de estos beneficios ecológicos se ha reducido el consumo de agua a un rango de 200 a 450 litros por quintal oro procesado, muy por debajo de los 2,000 litros o más que usan los beneficios tradicionales.
Esta reducción implica una disminución directa de la contaminación ambiental por aguas mieles.