ESPAÑA 02/03/2010
ASAJA reprocha la falta de medidas de las diferentes Administraciones para dar freno a la caída de la rentabilidad del sector agrario, que ha visto cómo sólo en los dos últimos años el número de productores españoles se ha reducido un 50%, viéndose afectados por una grave crisis estructural todos y cada uno de los sectores que conforman el agro.
Desde el punto de vista de ASAJA-Almería esto mismo sucede con nuestras distintas Administraciones que se dedican a opinar sobre todo, a señalar como culpables a los productores y a ofrecer soluciones inalcanzables en un momento de crisis como éste. Ya lo dice el refranero popular: “consejos vendo pero para mí no tengo”, sin duda una buena forma para definir a aquellos que pierden la fuerza por la boca.
Olvidan nuestros representantes por ejemplo que de 93 solicitudes presentadas el año pasado para modernizar las estructuras (número escaso si tenemos en cuenta el número de agricultores que hay en nuestra provincia) a día de hoy no se sabe nada, ni sí ni no. Estas ayudas, anunciadas una y otra vez a bombo y platillo son engorrosas para todo aquel que quiere solicitarlas, debiendo añadir incluso un Plan de Viabilidad de la explotación, por lo que se deduce que aquellos que no pueden hacer inversiones por falta de capital, es decir que no tienen viabilidad se van a quedar sin ayudas.
Tampoco parece lógico para ASAJA comparar nuestro modelo de producción con el de países como Holanda o Reino Unido, porque para empezar, en estos países el agricultor en la mayor parte de los casos comparte su actividad con el comercio e incluso las propias Administraciones facilitan que las explotaciones tengan otros ingresos como por ejemplo la venta de energía limpia. Es más, al ser destinatarios de muchos de los productos que desde aquí se producen, los agricultores reciben por su producto cinco veces más que lo que se recibe en nuestra provincia, de ahí que no pierdan competitividad aunque tengan más coste en mano de obra. En cambio, en España nos encontramos que los agricultores no tenemos ninguna propuesta de nuestro Gobierno a grandes superficies para vender el producto autóctono con un mayor margen para el productor, o para reducir costes en la cadena comercial, en transporte etc., o para que el consumidor español conozca el origen de los productos y consuma el producto nacional. Para ASAJA se necesitan crear alianzas entre las cadenas de distribución y las comercializadoras en origen para conseguir unos precios justos para todos, con márgenes razonables y evitando así la especulación.
Y es que siempre es más fácil poner a los agricultores en el punto de mira y evitar así el tener que tomar decisiones tal y como “sucede a muchos políticos, que para justificar ciertos hechos se dedican a difundir fábulas”, señala Francisco Vargas, presidente provincial de ASAJA, “porque hay que justificar que el problema de Almería no es la competencia desleal de Países Terceros, aunque se haya perdido el 80% del mercado tal y como ocurre en Perpignan”.
Otro ejemplo lo encontramos al afirmar que todos podemos estar asegurados ante los daños producidos con las lluvias porque con los seguros están cubiertos todos los daños, nada más lejos de la realidad, ya que hay que recordar que “aunque uno asegure con la línea más completa su explotación, como puede ser la de tomate de invierno, ni todos los daños están asegurados, ni todos los agricultores podíamos contratarla”.
ASAJA cree que lo importante es reconocer la difícil situación por la que atraviesa el sector agrario, que es innegable, y así poner en marcha soluciones o al menos buscarlas. Y para eso está la Administración. Hace varios meses que comenzaron las negociaciones tras la multitudinaria manifestación del 21 de noviembre en Madrid, negociaciones para dar solución a la crisis del campo y que hasta ahora siguen sin dar los resultados esperados.
“Necesitamos sistemas impositivos que se adapten a la situación del campo, a la realidad, y que se eviten comentarios demagógicos y la mayoría de las veces poco acertados de los responsables de la Administración que tienen como misión defender al campo”.
Igualmente recordamos que para buscar soluciones estamos todos los que trabajamos para el agricultor, y desde ASAJA esperamos que así sea y que los políticos dejen de vivir ajenos a este sector.