La agricultura como solución al cambio climático

La Organización de Grandes Agricultores Europeos (European Landowners Organization) y Syngenta acaban de organizar conjuntamente en Bruselas el III Foro para el Futuro de Agricultura, que ha reunido a más de 600 altos cargos e influenciadotes tanto de la Comisión y del Parlamento Europeo, como de asociaciones de agricultores, industria agroalimentaria y consumidores. Aprovechando este foro de debate, John Atkin, miembro del Comité Ejecutivo de Syngenta a nivel mundial como director ejecutivo de Protección de Cultivos, afirmó que la agricultura “debe formar parte de la solución para luchar contra el cambio climático por lo que tenemos que apostar por explotaciones agrícolas bien gestionadas, sostenibles, económicamente viables y que cuiden el medioambiente y ayuden a asegurar la producción de alimentos en cantidad suficiente, seguros y a precios asequibles (Seguridad Alimentaria)”.

Bajo el título “Aspectos económicos y políticos de la Seguridad Alimentaria versus Cambio Climático” este importante Foro internacional reunió a personalidades de la política y la economía agraria europea como Paolo de Castro, presidente de la Comisión de Agricultura del Parlamento Europeo, Jagdish Bhagwati, Consejero Especial de la ONU para temas de globalización y miembro de la Organización Mundial de Comercio, Joseph Glauber, economista principal la DG Agricultura de la Unión Europea, Alexander Sarris, director de Comercio y Mercado de la FAO, Tassos Haniotis, también de la DG Agricultura, o Josep Puxeu, como representante del MARM en la Presidencia Española de la UE. Con este nivel de participación, los debates fueron realmente interesantes y quedó claro que la agricultura productiva y sostenible es básica para la seguridad alimentaria en Europa.

En este contexto, John Atkins fue un paso más allá al afirmar que la agricultura y el cambio climático van intrínsecamente unidos ya que, por un lado, el sector agrario produce Gases de Efecto Invernadero (GEI) por la ampliación del uso de tierras forestales para agricultura, por malas prácticas agrarias y por los efectos de la ganadería extensiva pero, por otro lado, la agricultura tiene un gran potencial para reducir sus emisiones GEI (ayudando a los agricultores a un manejo sostenible de los cultivos y al uso eficiente de los recursos naturales) y, además, los cultivos agrícolas son un importante sumidero de CO2. Para el representante de Syngenta, “la agricultura es parte de la solución al Cambio Climático y es fundamental para la seguridad alimentaria, pero siempre que podamos aumentar las producciones sin aumentar la superficie agrícola para mantener los hábitats naturales existentes y asegurar la biodiversidad”. Este reto pasa, según John Atkins, por “la formación continua de los agricultores, el uso de las nuevas tecnologías y la investigación para conseguir más alimentos sin dañar el medioambiente”.

Para Atkins los gobiernos europeos y de todo el mundo también tienen parte de responsabilidad en este cambio de cara al futuro, por lo que deben fomentar el incluir a la agricultura en los mercados de emisiones de carbono, fomentar las prácticas que reducen los GEI, limitar los cambios en el empleo de la tierra (por ejemplo, evitar la deforestación de selvas tropicales) y apoyar la I+D+i y las nuevas tecnologías para lograr un uso más eficiente de los recursos naturales. Para finaliza, John Atkins afirmó que “conseguir este cambio en la agricultura para aumentar los beneficios medioambientales, sociales y económicos que reportan a la sociedad depende totalmente de los agricultores, pero para ello deben trabajar en un contexto económicamente viable y que la opinión publica valore su trabajo como provechoso para toda la sociedad”.