ESPAÑA 06/05/2010
El Gobierno francés tratará de forzar un gran acuerdo en la cadena alimentaria para mejorar el reparto de los márgenes en el sector hortofrutícola. Así lo declaró recientemente el presidente de la República gala, Nicolás Sarkozy, en una en¬tre¬vis¬ta concedida a la revista ‘France Agricole y Agra’ en la que además aclaró que el próximo día 17 está prevista una reunión entre los representantes de los agricultores, la industria y la gran distribución del país vecino para lograr que éstos últimos suscriban un acuerdo en este sentido antes de verano.
El citado pacto sobre los márgenes de frutas y hortalizas se aplicaría sólo en momentos de hundimiento en las cotizaciones en origen. El presidente de la Asociación Valenciana de Agricultores (AVA-ASAJA), Cristóbal Aguado, reclama al Gobierno español que siga los pasos dados por Francia y lamenta el “fracaso” de las mesas de negociación abiertas tras las históricas movilizaciones agrarias del 20 y 21 de noviembre cuyas soluciones son “sólo parches que no resistirán la presión de la mayor crisis agraria de la historia”.
Según aclaró el propio Sarkozy, el objetivo de este gran acuerdo beneficiaría tanto a los consumidores, que en los momentos de dificultad como los presentes no tendrían que asumir un precio por las frutas y hortalizas excesivamente alto, como a los productores, que dejarían de percibir unas cotizaciones ruinosas. Con tal meta, el presidente francés ha advertido ya que las grandes cadenas que no se avengan a rubricar el pacto serán “penalizadas”.
El anuncio hay que enmarcarlo en el conjunto de medidas que el Ejecutivo del país vecino está preparando para mejorar la situación de sus productores, de los ganaderos del sector lácteo y muy especialmente del hortofrutícola. En esta línea se entienden la exoneración total de las cotizaciones a la Seguridad Social para los jornaleros, las deducciones aprobadas por las cotizaciones de los agricultores y sobre todo, los cambios que se promoverán cuando se apruebe definitivamente la Ley de Modernización de la Agricultura.
Según el proyecto de ley ya sancionado, el nuevo marco regulatorio reforzará el marco de actuación de las interprofesionales, en particular en materia de desarrollo de contratos-tipo y la definición de guías de buenas prácticas comerciales.
La situación francesa contrasta con la actitud que ha mantenido el Gobierno al respecto, muy especialmente desde que el propio Presidente, José Luís Rodríguez Zapatero, impulsó las negociaciones con los convocantes de las históricas protestas de noviembre. De las ocho mesas planteadas sólo se ha sacado en claro el Plan de Financiación, una serie de ayudas y avales para abrir el crédito al sector y para facilitar moratorias a los agricultores en los préstamos ya concedidos.
ASAJA reclama por todo ello al Gobierno que las medidas a impulsar se reorienten como en Francia hacia el mercado, hacia una mayor transparencia en el proceso de configuración de los precios de los productos frescos y un mejor reparto de los márgenes. “Se impone un manual de buenas prácticas comerciales, contratos con indicadores de referencia como los aprobados en Intercitrus o Alimpo para los cítricos y fomentar medidas como el seguro de ingresos para estabilizar las rentas del eslabón más débil de la cadena, que somos los agricultores”, concluye el presidente de AVA-ASAJA.
Desde ASAJA-Almería nos reiteramos en la necesidad de que nuestro ejecutivo tome buena nota de las iniciativas que surgen en otros países europeos, ya que el sector hortofrutícola no podrá soportar la presión que ejerce la distribución mucho tiempo más.
Son ya muchos años denunciando la descompensación existente en la cadena alimentaria, pero a pesar del reconocimiento de la posición de dominio que ejerce la gran distribución por parte incluso del Gobierno, los agricultores no hemos conseguido ni el apoyo necesario ni la articulación de mecanismos de compensación a los eslabones más débiles en esta cadena comercial: el productor y el consumidor.