Chile 24/08/2010
Después de una etapa con pérdidas económicas, los agricultores participantes en un programa de innovación para granos doblaron el margen de las ganancias obtenidas por el cultivo de cereales y oleaginosas durante la temporada 2009-2010. La iniciativa, que se desarrolla en la de la Región de La Araucanía, es cofinanciada por el Ministerio de Agricultura, a través de la Fundación para la Innovación Agraria (FIA) desde 2007.
El Programa de Innovación Territorial (PIT) “Desarrollo de un modelo de integración efectivo y sustentable de pequeños productores y de la Agricultura Familiar Campesina (AFC) con la industria oleaginosa y cereales para la Región de la Araucanía” es ejecutado por Oleotop, junto a 47 agricultores de las comunas de Gorbea, Pitrufquén y Freire, y las empresa Saprosem, Granotop, Avenatop, con quienes estableció el joint-venture AGROPIT.
Antecedentes del AGROPIT señalan que el 50% de la superficie arable en la Región de La Araucanía está en manos de pequeños productores. Esta situación era un factor positivo para el programa que nació con el fin de aumentar la superficie de raps, el cual es utilizado por Oleotop para fabricar aceite que es vendido como alimento animal.
Se buscó crear un modelo de gestión técnico para fortalecer el encadenamiento de los productores, incluyendo a la Agricultura Familiar Campesina (AFC), con la industria de cereales (trigo y avena) y, especialmente, oleaginosas (raps). Este último no es un cultivo masificado entre los pequeños agricultores de la zona, porque requiere de tecnología apropiada.
La gerente general del Agropit, Pamela Penrroz, señaló que “el año en que partió el programa, surgió la crisis en la industria salmonera por la presencia del virus ISA. La situación golpeó al raps, porque es la base para fabricar alimentos para animales y las salmoneras eran nuestros principales clientes”.
En la temporada 2008-2009, la iniciativa determinó que los cultivos de cereales y oleaginosas en la Región de La Araucanía se distribuían entre: la avena (273 ha), raps (188 ha) y trigo (139 ha); a su vez, la oleaginosa se ubicaba como la tercera especie más importante en la rotación de cultivos.
Sin embargo, la superficie de raps cayó el 2009-2010, siendo superado por el trigo (569 ha).
No obstante, en los últimos años, la avena se ha consolidado como un importante cultivo en la zona sur, debido a los cambios tecnológicos que se han aplicado en el sistema de producción. Por lo tanto, se ha posicionado como una alternativa en la rotación de cultivos de cereales.
El ejecutivo de innovación de FIA y supervisor del proyecto, Claudio Soler, precisó que la avena jugó un papel importante frente al problema del raps. De igual manera el modelo de alianza del AGROPIT, ya que permitió no sólo que los productores y las empresas superaran la crisis de mercado de la temporada 2008-2009 (altos precios de insumos y bajos precios en productos), sino también, sirvió para detectar y desarrollar nuevos emprendimientos en una estructura comercial asociativa entre productores y Oleotop.
Nuevo giro
En su primera etapa de trabajo, el programa caracterizó el estado y potencial productivo de los agricultores con el objetivo de evaluar su impacto económico a la hora de incorporarse al PIT. Los antecedentes obtenidos indicaron que los participantes eran usuarios de INDAP, tenían poca experiencia con raps, pero buenos resultados con trigo y avena; además, la mayoría vendía sus granos al momento de la cosecha y otros directamente a los molinos.
Otros avances fueron el interés despertado por el trabajo y las ganancias. Penrroz indicó que en un comienzo este programa tenía 33 productores entre los cuales sumaban 560 ha. Hoy registran 1.400 ha y se proyecta llegar para la temporada 2010-2011 a las 2 mil.
A nivel de beneficios económicos, las pérdidas por M$390.967 (2008-2009) fueron superadas al período siguiente con ingresos por M$612.526; mientras que para el 2010-2011, se proyectan ingresos por M$1.017.335
Por otra parte, Oleotop prontamente habilitará una pequeña planta piloto de envasado de aceite de raps. Para el 2010-2011, los ejecutores del programa esperan consolidar el modelo de negocio, a través de la oferta de un aceite con valor agregado, es decir, para un nicho de consumo diferente: el humano.
“La empresa ofreció repartir los márgenes obtenidos por el aceite raps canola Premium entre los agricultores que siembren raps y la industria, para incentivar su cultivo. La idea es que ellos formen una asociación de productores —actualmente con su personalidad jurídica en trámite— para formalizar contratos donde se establecerá cómo vamos a trabajar para que no se desvinculen de la industria una vez concluido el AGROPIT”, añadió la ejecutiva.
Además, se está trabajando en la implementación de una metodología financiera que permitirá fijar anticipadamente los precios de los granos (hedging), con el objetivo de traspasar el riesgo de la fluctuación de estos valores al mercado.
También se capacitará a los asociados en gestión productiva, es decir, control de costos para que lleven sus propios registros una vez finalizado el PIT.
Por último, la ejecutiva acotó que INDAP ofreció a los agricultores trabajar en conjunto con la industria de cereales y oleaginosas, a modo de incentivar la rotación de ciertos cultivos. “Aquí es donde también entra el PIT, porque esta ‘cadena productiva’ considera que, al final cada tercera temporada, un agricultor debe terminar con una siembra de pradera o trébol rosado. En este caso, se optó por esta última especie”, finalizó Penrroz.
El monto total del programa es de $511.721.896 al que FIA otorgó el 62,13%