ESPAÑA 29/12/2011
Tal y como señalara ASAJA, una vez finalizada la semana con mayores pedidos a las empresas de comercialización almerienses, la segunda de diciembre, han vuelto a caer los precios de los productos hortícolas, y llama especialmente la atención esta caída en productos como pepino o berenjena, cuando Almería tiene el 90% de la cuota del mercado europeo en estos momentos.
Resulta llamativo ver cómo algún representante de la distribución, como el gerente de Aces, Aurelio del Pino, afirma en un reportaje del Grupo Joly que los proveedores en origen no se quejan por esta situación de bajos precios, lo cual sería la confirmación del ambiente de conformismo en el que vive el comercio de Almería y que fue denunciado por la organización estas últimas semanas.
Por este motivo nace la petición de ASAJA de reciprocidad a los intermediarios y a la gran distribución, ya que el pago de un precio indigno por nuestros productos está repercutiendo negativamente en los agricultores que no pueden afrontar los pagos básicos para sus explotaciones (seguridad social, fertilizantes, mano de obra etc.)
La situación es generalizada a todos los sectores productivos, por este motivo todos y cada uno de los agentes que participan a lo largo de la cadena, empezando por el productor, deben implicarse en la formación de los precios y evitar la actual “guerra” que está llevando a sectores que todavía seguían en pie, como es el caso del hortofrutícola, a un callejón sin salida.
Además, queremos destacar que la situación en la que viven nuestras pizarras no es más que un espejismo, y que productos como el pepino siguen, a pesar de la campaña de Navidad, con cotizaciones que ya deberían haber provocado acciones por parte de nuestras empresas puesto que su precio medio este mes de diciembre es de 0,25 euros a pesar del incremento experimentado en los últimos quince días, siendo un 32,4% inferior al precio registrado por este producto en diciembre de 2010. Pero es más, según datos de ASAJA sólo la berenjena se sitúa por encima de su cotización registrada en diciembre del año pasado y productos como el calabacín sufren un descenso medio del 50% en su valor ¿Qué explicación van a dar ahora al agricultor?
En comparación con el mes de diciembre del año pasado el precio del tomate cae un 32%, el pimiento un 35% y la judía verde un 23,5%, motivo más que suficiente para que desde ASAJA nos temamos que con la llegada de 2012 volvamos a la situación del pasado mes de noviembre.
Por todo el valor y la riqueza que las frutas y hortalizas almerienses generan desde ASAJA pusimos en marcha esta campaña de concienciación “Si sabes lo que te cuesta ¿por qué no decides a cuánto vendes?”, dirigida al agricultor pero que también pretende llamar la atención a empresas, comerciales, y distribuidores, de ahí la exigencia de poner sobre la mesa el concepto de reciprocidad social con el agricultor.
Y en un momento en el que las empresas de comercio en origen guardan silencio, las grandes cadenas de distribución se esfuerzan en mostrar que no tienen poder para influir en los precios y señalan al sector almeriense como origen del problema, desde esta organización agraria queremos insistir en la gravedad de la situación y en la necesidad de articular fórmulas o modelos que puedan aplicarse para evitar los abusos y el abandono del agricultor a su suerte. Sirva como ejemplo el modelo holandés donde se han creado sus propias plataformas comerciales en las que participa el agricultor, siendo el comercio una actividad complementaria a la producción de hortalizas.
ASAJA insiste en que es vital que el agricultor se sienta dueño de su empresa y que sea desde el seno de las propias empresas de comercio donde debe nacer un nuevo modelo de venta, basado en la rentabilidad, la calidad y la seguridad y no en limpiar almacenes o mandar producto sin precio, una práctica que nos trae más quebraderos de cabeza que ventajas competitivas.