ESPAÑA 30/05/2012
La “Bolsa Andaluza de Trigo Duro” evoluciona, se amplía y da un giro de de 180º para convertirse en la “Bolsa Andaluza de las Materias Primas”, que celebrará el viernes, 1 de junio, su cuarta edición, y reunirá de nuevo en Sevilla a compradores y vendedores de trigo duro, trigo blando, trigo forrajero, maíz, harinas proteicas y aceites vegetales (girasol, soja, palma y oliva), materias primas básicas para la industria agrolimentaria y para la fabricación de piensos.
Con este encuentro no ha podido la crisis económica, que se ha llevado por delante muchos de los eventos empresariales que se celebraban anualmente en la capital de Andalucía, ni siquiera la sequía, un factor que ha obligado a replantearla y a dar un giro al modelo, que en sus tres ediciones anteriores se apoyó fundamentalmente en la comercialización del cereal andaluz, y en especial del trigo duro hacia el resto del mundo, dado que Andalucía, con una media de producción de 700.000 toneladas anuales, es la primera región española productora de este cereal, destinado a la fabricación de pastas.
Este año sin embargo, la sequía que padece Andalucía, cuyas campiñas cerealistas han sufrido un déficit de precipitaciones de un 60%, ha reducido las expectativas de producción de cereal en más de un 70% tal como han puesto de manifiesto en sus previsiones la Asociación de Comercio de Cereales y Oleaginosas de España (ACCOE) y organizaciones agrarias como ASAJA-Sevilla, hacía peligrar este encuentro que en 2012 celebrará su cuarta edición anual consecutiva y contará finalmente con un 30% más de participantes de los que tuvo en la edición de 2011.
Ante este panorama agrario desolador, los impulsores de la “Bolsa Andaluza de Trigo Duro”, lejos de tirar la toalla, no sólo mantienen, sino que refuerzan su ya tradicional encuentro del mes de junio, al ampliar la lista de materias primas comercializables y sobre todo dan un giro de 180º a su cuarta edición, que a modo de misión inversa, pondrá en contacto el próximo viernes en Sevilla a los jefes de compra de la industria agroalimentaria nacional y a los jefes de compra de las fábricas de pienso para la ganadería con los vendedores de estas materias primas procedentes de terceros países, facilitando así los intercambios de información y las posibilidades de acuerdo y negocio.
