CEMA (Asociación Europea de Maquinaria Agrícola) a la que pertenece ANSEMAT (Asociación Nacional de maquinaria agropecuaria, forestal y de espacios verdes) certifica que el año pasado resultó de nuevo positivo para los fabricantes de maquinaria agrícola europeos, siguiendo las tendencias positivas de los años anteriores, al mantenerse al alza la demanda para casi todos los tipos de maquinaria.
El aumento global de la demanda de maquinaria agrícola impulsó la producción el año pasado hasta un máximo histórico de 95.000 millones de euros (según los datos del VDMA alemán) con unas perspectivas positivas para el 2014. A pesar de un potencial ligero descenso, se espera que estos altos niveles de producción se mantengan estables. A nivel mundial, Europa, se mantiene como el más importante productor de maquinaria agrícola absorbiendo un 31% de la producción total, seguido de Estados Unidos (26,5%) y China (19%). La producción absoluta en Europa ha seguido creciendo, alcanzando niveles record aunque globalmente se haya reducido en los últimos años en comparación con los altos crecimientos, relativos, de Estados Unidos y China.
Por tipos de máquinas el que ha presentado un mayor volumen de ventas ha sido el de tractores que durante 2013 registró casi 137.000 unidades entre los nueve países miembros de CEMA (Asociación Europea de Maquinaria Agrícola): Austria, Bélgica, Finlandia, Francia, Alemania, Italia, Holanda, España y Reino Unido. Si se observan los cinco mercados más significativos: Alemania, Francia, Italia, Reino Unido y Bélgica el total de inscripciones descendió ligeramente (-0,5%) en comparación con el mercado del año 2012 que fue calificado como un buen año. De forma específica, la demanda del mercado francés (el más grande) aumentó en un 3,3%, mientras que las inscripciones en Alemania (el segundo mercado más fuerte) se mantuvo virtualmente sin cambios. El mercado italiano cayó solo un 1,7% frente al descenso del Reino Unido, un 9,9%. Las expectativas para 2014, muestran una leve caída global.
En cuanto a la tipología más demandada se confirma que durante 2013 se dirigió hacia tractores más grandes y potentes. Mientras en 2009 el mercado de tractores de menos de 50 CV suponía el 23% del total en 2013 esta cifra se rebajó hasta el 14%.
Para otros mercados, 2013 también ha resultado un buen año como es el caso de las cosechadoras de cereales con una demanda que se ha mantenido estable en altos niveles con especial relevancia del mercado francés donde las ventas crecieron significativamente.
En Polonia y Alemania, no se ha observado estacionalidad en la demanda mientras el mercado de Reino Unido mostró un descenso considerable. Sin embargo, las expectativas para 2014 no son tan optimistas ya que se espera que la demanda vuelva a caer.
El mercado de picadoras de forraje que había experimentado un mercado excepcional en 2012, debido esencialmente a la fuerte demanda en Alemania, volvió en 2013 a niveles normales en la mayoría de los mercados aunque se espera que vuelvan a crecer de nuevo en 2014.
Entre otros tipos de maquinaria destacaría el mercado de maquinaria destinada al trabajo de suelo y siembra, por encima incluso de los excelentes resultados de 2012. En el caso de los equipos destinados a la protección de cultivos destaca la fortaleza del mercado alemán, cuyas expectativas para 2014 se reducen y la estabilidad en Bélgica o Reino Unido. En cuanto a las abonadoras no mostraron la misma dinámica positiva que el resto de mercados con una demanda estable y que fue menor frente a los datos de 2012. Otro tipo de equipos, como es el caso de los sistemas de ordeño mostraron también un ligero incremento de la demanda al tiempo que se dirige a sistemas con mayor automatización.
El estado de ánimo generalizado en la industria se muestra optimista teniendo en cuenta los datos recogidos por el Barómetro de negocio del CEMA. Este estudio mensual, que recoge la opinión de más de un centenar de directivos de empresas europeas de maquinaria agrícola, cubriendo la mayoría de los sectores y categorías de productos, sitúa el índice de clima de negocio (una media porcentual entre los resultados de la facturación actual y las previsiones a seis meses vista) en 18 puntos positivos (dentro de un rango de +/- 100 puntos).
