Factores limitantes de la mosca del olivo

Se observan los primeros frutos picados por Mosca del Olivo (Bactrocera oleae) en zonas aisladas de las provincias de Cádiz, Córdoba, Huelva y Sevilla. En el resto de provincias, la presencia es casi anecdótica, favorecido además por las altas temperaturas de las últimas semanas.

En cualquier caso, se aconseja el seguimiento del cultivo con la colocación de trampas (Mac-phail y Cromotrópicas) para cuantificar las poblaciones de adultos de este agente.

Debemos de conocer que el adulto de este insecto, siente predilección para realizar las puestas sobre aquellos frutos que han alcanzado el estado fenológico “H” (Endurecimiento de hueso) y cuyo diámetro menor tiene un centímetro aproximadamente.

Un factor limitante en la actividad de este insecto son las condiciones ambientales de temperatura y humedad relativa, así pues:

a) Con temperaturas superiores a 30ºC induce a una reducción de la fecundidad en las hembras.

b) Temperaturas continuadas por encima de 32ºC durante varias horas al día provocan una mortalidad superior al 80% de huevos y larvas de primer estadio de desarrollo.

Para los diferentes estados evolutivos de este agente existe una banda térmica de viabilidad, así pues, cuanto más nos aproximemos a estos límites, ralentizamos su evolución:

a) Fase de Huevo: entre los 6ºC y 35ºC.

b) Fase de Larva: entre los 8ºC y 30ºC.

c) Fase de Pupa: entre los 7ºC y 36ºC.

d) Fase de Adulto: entre los 0ºC y 40ºC.

Por lo tanto, esta especie se desarrolla cómodamente entre los 20 y 30ºC, con ambiente húmedo. Por lo mencionado anteriormente, es conveniente saber que geográficamente, hay una mayor incidencia en el sur que en el norte y en las regiones costeras que en las del interior.

En referencia a la humedad relativa, tiene también una incidencia importante en el desarrollo de esta plaga, pues son las condiciones de humedad atmosférica alta y de temperatura suave, donde delimitan las zonas endémicas.