Azucarera lleva desde 1903 produciendo azúcar a partir del cultivo de la remolacha, hasta alcanzar en la actualidad una superficie cultivada de 16.000 hectáreas de cultivo de remolacha repartidas entre el norte y el sur de España, en las que trabajan cerca de 4.000 agricultores de Castilla y León, Andalucía, La Rioja, País Vasco y Navarra. Durante el proceso de obtención del azúcar a partir de la remolacha, se obtienen diferentes subproductos, que la compañía azucarera ha querido aprovechar y revalorizar, haciendo uso de la economía circular. Así es como, hace cuatro años, nació Betalia.
“Betalia es la marca de Azucarera para la comercialización de todos los productos no destinados a la alimentación humana. En este sentido, contamos con productos para la alimentación animal, productos para la nutrición y mejora de los cultivos agrícolas y del suelo, así como sustratos para fermentación y la producción de microorganismos a nivel industrial. La idea surgió hace aproximadamente cuatro años con el objetivo de dar mejor aprovechamiento a todos los productos que se pueden obtener a partir de la remolacha, y con el objetivo de cerrar el círculo, es decir, aprovechamos todos los productos que se obtienen de la tierra para su uso agrícola, ganadería o fermentación, con la idea de devolver al campo lo que es del campo”, explica José Antonio Torres, director de Ventas de Betalia.
Para uso agrícola, Betalia ofrece alternativas más naturales a los abonos convencionales, aprovechando y enriqueciendo los subproductos que Azucarera obtiene de la remolacha. De esta manera, Betalia hace uso de estos productos naturales para crear enmiendas calizas para suelos ácidos o para la producción de abonos orgánicos líquidos: propuestas nutricionales eficaces para la agricultura que obedecen a las necesidades de los agricultores, en su contacto directo con los ingenieros agrónomos y técnicos agrícolas con que cuenta Betalia a pie de campo para asesorar a los productores sobre la aplicación de los distintos productos y para realizar el seguimiento de los cultivos: “Los productos que tenemos tienen un alto contenido en azúcares, minerales, betaína y vitaminas, de origen 100% vegetal, que se utilizan principalmente como bioestimulantes. El más demandado es Stimel. Al proceder de la remolacha, tiene un alto grado de azúcares y betaína, muy importante para la activación de los cultivos y también para reducir las situaciones de estrés que tiene la planta, ya sea por falta de agua, con lo que sería un estrés hídrico, o por exceso de calor, un estrés térmico. De esta forma, la betaína de Stimel contribuye a contrarrestar ese efecto negativo del estrés en la planta”, subraya Torres, quien señala que este producto se está utilizando en todo tipo de cultivos, incluyendo el propio cultivo de la remolacha, así como en cultivos hortofrutícolas en Almería y Murcia, aplicado en riego por goteo; para cultivos ecológicos de cereales, y cultivos de árboles como cítricos; almendros, en Soria y Zamora; y olivos, en Sevilla, Huelva y Extremadura. “Además, tenemos una gama de productos que llamamos Stimel Huerto y Jardín, en formato más pequeño, que se puede utilizar para uso doméstico o para huertos urbanos”, matiza José Antonio Torres. “A parte de eso, tenemos también una serie de productos, que también se obtienen del proceso de producción del azúcar, basados en carbonato cálcico, que sirve para mejorar el pH del suelo. La aplicación de este producto, que se llama Carbocal, nivela el pH del suelo y consigue mejorar el resultado del cultivo. Por otro lado, hemos desarrollado un producto que llamamos Betatrap, que es un atrayente de insectos. La finalidad de este producto es que el agricultor lo utilice junto al insecticida para atraer a los insectos gracias a su alto contenido de azúcar, y eliminar la plaga del cultivo”, desglosa el director de ventas de Betalia, que además cuenta con Topsoil, un sustrato fértil de cultivo natural, que se prepara en distintas variedades y mezclas para adaptarlo en granulometría y contenido de nutrientes al tipo de suelo y a las condiciones requeridas por el cultivo, pudiendo ser utilizado tanto para cultivos hortícolas, plantaciones de árboles y arbustos, como para la siembra y mantenimiento de césped deportivo o jardinería, así como para la restauración ecológica de suelos pobres y degradados, y la regeneración de suelos contaminados.
En definitiva, se trata de un elenco de productos 100% vegetales y que, por tanto, son aptos para agricultura ecológica, así como cuentan con la certificación de CAAE para su uso en esta modalidad de agricultura. “Actualmente, estamos comercializando nuestros productos a nivel nacional, aunque nos consta que algunos de nuestros clientes están exportando. Contamos con dos líneas de comercialización: por un lado, llegamos al consumidor final, al agricultor, a través de distribuidores; y por otro lado, contamos con clientes industriales que utilizan Stimel como un ingrediente a la hora de formular otros abonos más complejos, y que comercializan sus productos no sólo en España, sino también en Oriente Medio, Norte de África y América”, indica Torres, quien asegura que “Betalia ha ido creciendo bastante en estos cuatro años, porque empezamos con una actividad muy pequeña, comercializando productos para ganadería, y después empezamos a desarrollar productos para uso agrícola. En los dos últimos años, además, hemos empezado a desarrollar sustratos de biofermentación para fabricantes de productos biotecnológicos. Nosotros desarrollamos conjuntamente con nuestros clientes unos sustratos para que los microorganismos que producen nuestros clientes, puedan optimizar su crecimiento, y producir, así, un determinado tipo de producto. De esta manera, en estos cuatro años, hemos logrado multiplicar por cinco nuestro volumen de productos, y en lo referente a nuestra línea de productos para uso agrícola, seguimos trabajando en todo tipo de cultivos, especialmente en hortofrutícolas y cultivos ecológicos de cereales, como el trigo o la quinoa”, señala el responsable de ventas.
Participación en Fruit Attraction
Del 22 al 24 de octubre, Betalia participó por segundo año consecutivo en Fruit Attraction: “La presencia de Betalia en Fruit Attraction el año pasado fue muy positiva. Nos sirvió para contactar con bastantes clientes, y sobre todo con muchos distribuidores, de forma que gracias a nuestra participación por primera vez en Fruit Attraction, hemos podido expandir nuestra red de distribuidores a nivel nacional, permitiéndonos mayor capilaridad y llegar a un mayor número de clientes. Este año, el producto se va conociendo más en el mercado y hay más interés por parte de clientes y distribuidores”, destaca Torres, aludiendo al gran valor en el conocimiento de Betalia y a la expansión de la misma que supone la feria de Madrid para la compañía.