El Gobierno francés se compromete a reducir el impacto del uso de productos fitosanitarios en polinizadores y ecosistemas, por lo que ha decidido prohibir el uso de dos sustancias fitosanitarias con modos de acción idénticos a los neonicotinoides, en aplicación de la ley EGAlim.
Los neonicotinoides son una familia de sustancias utilizadas en productos insecticidas. Estas sustancias actúan sobre el sistema nervioso central de los insectos. Debido a su toxicidad para los polinizadores, como lo demuestran numerosos estudios, estas sustancias son una de las causas de la disminución de las colonias de abejas.
Desde el 1 de septiembre de 2018, Francia prohibió, bajo la Ley de Biodiversidad de 2016, el uso de 5 sustancias activas de la familia de los neonicotinoides en productos fitosanitarios y en el tratamiento de semillas.
El Gobierno desea ir más allá en la protección de la salud y el medio ambiente mediante la implementación de la prohibición prevista en la ley EGALIM, sustancias con el mismo modo de acción que los neonicotinoides. En el estado actual del conocimiento, dos sustancias cumplen con esta definición: sulfoxaflor y flupyradifurona.
Es por eso que el Ministerio de Transición Ecológica y Solidaria, el Ministerio de Solidaridad y Salud y el Ministerio de Agricultura y Alimentación han redactado un decreto para prohibir estas dos sustancias al final de año. Este decreto se somete a consulta pública a partir del miércoles 11 de septiembre, durante tres semanas.
Al mismo tiempo, Francia está adoptando posiciones ambiciosas a nivel europeo para fortalecer la consideración de los impactos sobre los polinizadores en el proceso de autorización de nuevas sustancias fitosanitarias.