LANDALUZ, Asociación Empresarial Alimentos de Andalucía, lamenta decisión de la administración norteamericana y su intención de imponer unos aranceles a los productos agroalimentarios que perjudicaría a su competitividad. En la actualidad, el mercado americano es uno de los principales nichos de exportación de la industria agroalimentario, algo que se vería muy perjudicado por esta decisión del gobierno de Trump.
En un escenario de récords de exportación a este mercado, con un incremento de casi el 20% de ventas en los primeros nueve meses de este ejercicio ha servido para paliar la situación de mercados que se han estancado. Así, la imposición de estos aranceles anunciados por el gobierno norteamericano supondría un duro golpe para la exportación andaluza.
Por este motivo, para la Asociación es fundamental que los representantes de las Administraciones Públicas andaluzas y españolas hagan llegar el malestar del tejido productivo a la Unión Europea para que pueda negociar en los próximos días.
Desde LANDAUZ lamentan lo que consideran “unas medidas injustas con los productores andaluces, especialmente dañino después de las actuaciones que el gobierno de Trump tomó con alimentos como la aceituna negra, que han visto como las cifras de sus exportaciones bajaban de forma drástica”.
En este caso, son otros productos los que se podrían ver especialmente perjudicados como son los aceites de oliva, los vinos, los lácteos y los derivados del cerdo. Unos sectores que verían muy mermada su exportación en un mercado clave para el desarrollo económico de la industria agroalimentaria, y que se ha configurado como el primer destino no comunitario y el sexto a nivel mundial.
“EEUU ha sido un gran consumidor de alimentos andaluces y, ahora, nos vemos castigados por una guerra comercial que puede perjudicar las exportaciones españolas hasta en 1.000 millones de euros” aseguran desde LANDALUZ.
Y es que “las distorsiones generadas por anuncios como el de los aranceles o por el proceso del Brexit perjudican mucho a las empresas ya que produce una gran inseguridad por parte de los importadores”.