La primera manzana más adaptada al cambio climático se plantará en 2021 en Cataluña y está previsto que se comercialice en la Península Ibérica en un periodo máximo de 3 años. Es roja, crujiente, dulce y jugosa, y ha sido evaluada en los campos del Instituto de Investigación y Tecnología Agroalimentarias (IRTA) de la Estación Experimental de Lleida y en la Estación Experimental Agrícola Mas Badia, en La Tallada d’Empordà (Gerona), donde las temperaturas estivales pueden llegar a superar los 40ºC. Registrada con la denominación varietal HOT84A1, la nueva variedad de manzana es el primer resultado del programa internacional de mejora genética de manzana y pera Hot Climate Programme, que quiere dar respuesta a los retos del cambio climático. «Las nuevas variedades de manzana, creadas con métodos tradicionales tienen, como objetivo, adaptarse a unos veranos cada vez más calurosos», explica Joan Bonany, especialista del programa de Fruticultura del IRTA. Además, «proporcionan nuevas oportunidades a los productores para cultivar manzanas en regiones donde cada vez es más difícil cultivar manzanas, así como en zonas más próximas al consumidor», añade.
El Hot Climate Programme está formado por el IRTA, Fruit Futur -una asociación formada por los principales productores de fruta de Cataluña: Actel, Fruits de Ponent, Nufri y Poma de Girona- y el centro de investigación neozelandés Plant & Food Research, y cuenta con el apoyo del Departamento de Agricultura, Ganadería, Pesca y Alimentación (DARP) de la Generalitat de Cataluña. La empresa T & G Global ha sido seleccionada para desarrollar y comercializar estas variedades en todo el mundo. La asociación de productores catalanes Fruit Futur ha firmado recientemente la primera licencia para comercializar la HOT84A1 en la Península Ibérica.
Una demanda de los productores de fruta catalanes
A raíz de la demanda del sector productor de fruta en Cataluña, en 2002 el IRTA, Fruit Futur y el centro de investigación neozelandés Plant & Food Research ponían en marcha el Hot Climate Programme con el objetivo de desarrollar nuevas variedades de manzana y pera adaptadas a las altas temperaturas. En aquella época, los productores de fruta de Cataluña observaron que, debido a las condiciones climáticas, las variedades de manzana y pera que se habían cultivado hasta entonces tenían más dificultades para alcanzar una calidad óptima -en cuanto al color, la textura y el aroma- en las condiciones de cultivo de Cataluña. Dieciocho años después, los resultados de esta iniciativa de investigación e innovación comienzan a dar su fruto. En febrero de 2019, se llegó a un acuerdo con la empresa neozelandesa T & G Global, que se incorporó a este programa como socio estratégico para la comercialización mundial de las licencias de las nuevas variedades de manzana y pera.
Fuera de la Península Ibérica, empresas como Waimea Nurseries (Nueva Zelanda), TopFruit (Sudáfrica), Dalival (Francia), Worldwide Fruit (Reino Unido) y Montague (Australia), llevan a cabo ensayos de la variedad de manzana HOT84A1, en la que evalúan el comportamiento agronómico y la calidad.