La Comisión Europea ha aprobado el dispositivo de aranque sanitario de vides en Gironda (Francia) para luchar contra la flavescencia dorada mediante la densificación de los viñedos de Burdeos. El plazo de solicitudes se abrirá a finales de esta semana.
Un gran número de explotaciones vitivinícolas bordelesas, de múltiples perfiles, se encuentran sumidas en situaciones muy difíciles y sin poder, material y económicamente, continuar con el mantenimiento de su viñedo. El riesgo es que estas vides sean abandonadas y se conviertan en focos de enfermedades, como la flavescencia, exponiendo todo el viñedo a una situación fitosanitaria incontrolable.
En este contexto, el pasado mes de junio Marc Fesneau, Ministro de Agricultura y Soberanía Alimentaria de Francia; Alain Rousset, Presidente de la Región de Nueva Aquitania, y Allan Sichel, Presidente del Consejo Interprofesional de los Vinos de Burdeos (CIVB), firmaron un acuerdo tripartito para un programa de arranque sanitario para densificar los viñedos bordeleses y frenar la progresión de la flavescencia dorada.
Este programa, desarrollado conjuntamente por los servicios del Estado y el CIVB, tiene como objetivo, en una lógica de frenar la flavescencia del mineral, contribuir a mantener esta plaga en el nivel de prevalencia más bajo posible mediante la desdensificación del viñedo.
Se compone de tres partes:
- Arranque sanitario y posterior reorientación de las parcelas de viñedo hacia otras actividades agrícolas para diversificar los cultivos de los viticultores, mediante un sistema financiado por la CIVB;
- Arranque y posterior reforestación de parcelas de viñedos abandonadas, en particular mediante un sistema llave en mano con el grupo cooperativo Alliance Forêt Bois (AFB);
- Arranque sanitario de vides en proceso de abandono y luego destinado a forestación o conversión en áreas naturales, mediante un sistema financiado por el Estado.
El arranque sanitario de vides en proceso de abandono para forestación o reconversión en espacios naturales (financiación estatal) y el arranque sanitario de vides para diversificar los cultivos de los viticultores hacia otras actividades agrícolas (financiación del CIVB) se financiarán por importe de 6.000 € por hectárea. Las ayudas a la inversión de la Región completan el sistema para las parcelas en proceso de reconversión agrícola.
Para ello, Francia está movilizando una financiación de 30 millones de euros y ha comprometido hasta 38 millones de euros en función de las necesidades. La Región de Nueva Aquitania también movilizará 10 millones de euros y el Consejo Interprofesional del Vino de Burdeos 19 millones de euros.
El Ministerio de Agricultura y Soberanía Alimentaria de Francia notificó este verano a la Comisión Europea un plan de ayuda para el componente financiado por el Estado. La aprobación de la Comisión Europea el viernes 3 de noviembre, tras debates profundos y constructivos con esta última, permite finalizar el proceso: adopción del decreto y de la orden que establece las bases jurídicas del sistema, luego apertura de la ventana de solicitud. ayuda de FranceAgriMer a finales de la próxima semana.
Para Marc Fesneau, “la aprobación por parte de la Comisión Europea del régimen de ayudas estatales para el despliegue de ayudas al arranque sanitario en Burdeos es una muy buena noticia para el despliegue del compromiso tripartito asumido entre el Estado, la Región y el Consejo Interprofesional del Vino de Burdeos el pasado junio. Este compromiso tripartito refleja la movilización y el espíritu de responsabilidad de todas las partes implicadas para dar respuestas adaptadas a la viticultura bordelesa frente a las amenazas sanitarias en un contexto económico difícil.
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