Las precipitaciones acumuladas en las últimas semanas están afectando el desarrollo del trigo recién sembrado en amplias zonas de Argentina, pero las lluvias fueron favorables para otras regiones que necesitaban más humedad, informó el viernes el Ministerio de Agricultura.
Vastas zonas de la principal región productora de trigo del país, en el centro y el sur de la provincia de Buenos Aires, han sufrido lluvias excesivas que anegaron muchos campos y podrían afectar los rendimientos del trigo, un cereal del que Argentina es uno de los mayores exportadores a nivel mundial.
"Las lluvias de la semana complican la situación en amplias zonas del sur y centro bonaerense (por Buenos Aires)", señaló el Ministerio de Agricultura en su informe semanal de cultivos.
"Comienza a complicarse el panorama hídrico en Salliqueló -en el oeste de Buenos Aires-, a causa de lluvias en sectores con mayores guarismos en el año, con inconvenientes por anegamientos, encharcamientos y falta de piso", de acuerdo con el reporte.
La cartera agregó que, de todos modos, la situación del cereal es buena en otras regiones, como en las provincias de Córdoba y Santa Fe, dos de los principales distritos agrícolas de la nación sudamericana.
Según los datos oficiales, el 78 por ciento de las plantas de trigo se encuentra en un estado entre bueno y muy bueno.
Hasta el jueves -fecha de actualización del informe- los productores habían sembrado el 99 por ciento de los 4,5 millones de hectáreas previstos para el cereal 2014/15, sin cambios respecto de la semana pasada, aunque 1 punto por detrás del nivel de la campaña pasada.