COAG Andalucía valora la autorización de la suelta de ejemplares de torymus sinensis para combatir la plaga de la avispilla del castaño. No obstante, esta organización considera que la suelta experimental, aunque se haya ampliado notablemente el número de ejemplares, sigue siendo insuficiente para controlar la plaga, como demuestra la experiencia en otros países que la han padecido. Igualmente, tampoco ha resultado efectiva la poda de árboles que se realizó el año pasado, algo que también se esperaba, porque esta técnica no ha funcionado en otras áreas afectadas por la avispilla.
En ese sentido, el responsable de castaño de COAG Andalucía, Francisco Boza, ha declarado que “lo que se ha soltado es como una gota en el mar. La plaga se ha extendido ya al 50% del Valle del Genal, con una intensidad muy alta, y las medidas aplicadas el año pasado, tanto la corta de árboles como la suelta experimental de torymus, se han demostrado ineficientes para contener la plaga”.
Por eso, COAG va a seguir trabajando, dentro de la Red Estatal del Castaño, para que el Ministerio considere los trabajos que se han realizado, tanto a nivel internacional como desde Andalucía, a través del IFAPA, y que el año que viene autorice la suelta masiva del depredador como agente biológico, para poder agilizar así la erradicación de la plaga que está provocando una importante pérdida de producción en las zonas afectadas.
Esta organización agraria lleva ya varios años negociando, junto con la Red Estatal del Castaño, tanto con la Junta como con el Ministerio, del que dependen en último extremo la autorización (Concretamente, de la Dirección General de Evaluación y Calidad Ambiental). Como ha señalado Francisco Boza, “soltar un animal en la naturaleza no tiene nada de experimental. Debe autorizarse su uso como agente de control biológico, lo que permitiría hacer sueltas masivas, como hacen el resto de países europeos. Es lo único que realmente ha funcionado hasta ahora. Lo demás es seguir jugando con un sector cada vez más afectado”, concluye.