Fertinagro, multinacional líder en fertilizantes para la agricultura, está desarrollando la estructura comercial de su nueva línea de productos para jardín, Fertinagro Vida. Un proyecto que depende de la Fundación Térvalis y que da empleo a personas con más de un 33% de discapacidad a través de su centro especial de empleo.
Se trata de uno de los proyectos que lleva a cabo la fundación, que nació en 2005 dentro del Grupo Térvalis y que tiene por cometido “devolver a la sociedad parte de lo que nos ha dado”, según reza su lema. “En lugar de ayudar sólo económicamente, queríamos conseguir que la gente pudiera, por sí misma, generar un empleo estable”, explica Jesús Fernández, director de marketing de Fertinagro Biotech.
La fundación, a través de su centro especial de empleo, cuenta con un equipo compuesto hasta en un 80% por personas con discapacidad, que trabaja en la planta en actividades como el envasado, manipulación y etiquetado de los productos de la línea Fertinagro Vida. Esta línea, en la que actualmente se está trabajando su estructura comercial, cuenta con un catálogo inicial de cinco referencias, que forman el kit básico. “Estamos desarrollando más referencias para tener un catálogo más completo, pero ahora mismo tenemos los productos que harían falta para el cuidado del jardín de forma genérica: para mejorar el suelo, para el enraizamiento, para activar la planta, para nutrirla, y abono. La intención es, a partir de este catálogo estándar, seguir desarrollando el mercado, sobre todo el no profesional”, indica Fernández, quien destaca que cuatro de los cinco productos del catálogo son ecológicos: “la única referencia que no es ecológica es el abono azul porque la síntesis de determinados productos de origen mineral no es compatible con la certificación ecológica, pero nuestra idea es que, todo lo que podamos, sea ecológica. Tenemos productos ecológicos muy potentes en Fertinagro Biotech, para agricultura profesional, que iremos volcando al catálogo de jardín, buscando la forma para facilitar su uso al consumidor, ya que en garden, no suele tener los conocimientos técnicos suficientes para su manipulación, por lo que se tiene que su uso tiene que ser muy fácil y es por lo que se suele utilizar el ‘listo uso’”.
A día de hoy, Fertinagro Vida, que ya cuenta con web propia, se está comercializando a través de la misma línea de comercialización que los productos para agricultura profesional, en la que Fertinagro cuenta con más de 1200 distribuidores a nivel nacional. “Todos los clientes que tienen la opción de comprar los productos para agricultura profesional, pueden solicitarnos los productos de Fertinagro Vida. El canal garden es muy especializado, más marketiniano, más para uso doméstico y tiene un trato distinto. Nosotros ese canal de uso doméstico no lo hemos trabajado demasiado, aprovechando nuestra estructura comercial. De hecho, los productos de Fertinagro Vida han formado parte de alguna promoción de Supervia o Vigorión, de forma que les ofrecemos un producto que pueden comercializar, con lo que obtienen un beneficio, ya que un kit de Fertinagro Vida está valorado en 250 euros, y esto contribuye con los compañeros de la Fundación, además de darle visibilidad a Fertinagro”. De esta manera, Fernández explica que la Fundación Térvalis está apostando por el crecimiento de Fertinagro Vida, y es por lo que ha estado presente en la feria de jardinería y ornamentales de Valencia, Iberflora: “La línea de Fertinagro Vida está aún en desarrollo y la idea es que cuando tengamos la estructura comercial, alguien la potencie: estamos en búsqueda de un director comercial que desarrolle el proyecto, dedique el 100% de su tiempo a esto, y crecer. No nos ponemos límites, porque tenemos la estructura de un gigante”.
Fundación Térvalis: otros proyectos
La Fundación Térvalis, lleva a cabo, además, otros proyectos gracias a su centro especial de empleo, como Ama Lavanda, a través del cual fabrican aceite esencial de lavanda con una superficie de este cultivo de 80 hectáreas, que también está en vías de crecimiento: “como tenemos viveros, queremos crecer y ser viveristas, de manera que podamos ofrecer y comercializar plantas a terceros. De este modo, conseguimos tener una plantilla de personas que están en riesgo de exclusión o con ‘capacidades diversas’ que además, trabajan muy bien, porque están deseando ir a trabajar”, destaca el director de marketing de Fertinagro.
De igual modo, la fundación lleva a cabo otros proyectos como un taller de personalización de productos textiles, una lavandería y la gestión de un banco de alimentos.
Fertinagro Biotech: adaptación a las demandas del mercado
Por su parte, Fertinagro Biotech es una multinacional líder en la producción de fertilizantes para la agricultura profesional que basa su labor en el acompañamiento del agricultor durante el proceso de cultivo. “Nosotros trabajamos mucho con los Programas de Fertilización Integral (PFIs), es decir, cuando tratamos con un agricultor, le planteamos cómo tiene el suelo, qué tiene que hacer desde el principio y los productos, cantidad y fecha de utilización en función de las condiciones del suelo y los distintos factores que condicionan el cultivo”, explica Fernández, quien reconoce que el producto más demandado de Fertinagro es Supervia, un bioestimulante basado en aminoácidos y determinados catalizadores que “genera un efecto muy genérico de mejora en el cultivo, con un efecto antiestrés y de mejora del enraizamiento que proporciona un resultado muy visual: el producto “mágico” que en cualquier situación va a ayudar, por lo que es muy demandado”, pero especifica que un solo producto no lo da todo, por lo que es necesario incluirlo dentro del ciclo de los PFIs, que forman parte del servicio Agrovip de asesoramiento que ofrecen los 350 técnicos con los que cuenta Fertinagro en España. “Estamos teniendo muy buenos resultados y recibiendo muy buenas respuestas por parte de los agricultores, por lo que estamos muy volcados en eso. Nos está yendo muy bien porque es como si tuviéramos médicos de plantas en plantilla. Ahí está el acierto: el producto más la recomendación. Tienes que saber cuándo utilizar un producto u otro, cómo está el cultivo, etc: hay muchos factores de los que depende. El poder de personalizar en una visita la aplicación, es la clave para evitar el exceso de productos si no son necesarios, siendo así eficientes y sostenibles, resalta el director de marketing de la firma.
Fertinagro, como empresa líder en su sector, va ampliando su cartera de productos en función de las necesidades y requerimientos de los agricultores y del mercado. Tanto es así que la adaptación al nuevo reglamento de fertilizantes no ha sido un problema: “Estábamos más especializados en convencional porque era lo que vendía, con una proporción del 90% de nuestros productos para agricultura profesional y un 10% para ecológica. Si ahora miramos a la ecológica porque crece, lo hacemos según la normativa para productos ecológicos. Entonces, el nuevo reglamento, para otros ha sido un drama, porque han perdido el catálogo entero, ya que era un tema que no estaba bien definido y en el que había poco control, pero nosotros no hemos tenido ningún impacto, ni negativo ni positivo, con la nueva normativa. Yo creo que con el nuevo reglamento, se garantizan ciertas materias activas y la trazabilidad, lo que es bueno para todos: para el consumidor y para el fabricante. Creo que ya hay más sensibilización”, afirma Fernández, quien también destaca el avance y la investigación que Fertinagro está llevando a cabo sobre temas como el biocontrol o los microorganismos: “en biocontrol ya tenemos una persona que entró en el grupo y está liderando el proyecto para el desarrollo de productos que puedan tener una valoración en el mercado y que, con los protocolos para homologarlos, podamos comercializarlos. Aún estamos en fase de despegue en cuanto al biocontrol, pero llegaremos a tener este tipo de productos”. De igual modo, explica que “somos líderes en investigación sobre microorganismos, porque aparte de los biorreactores que hemos ampliado en Utrillas (Teruel), para empezar a producir el microorganismos, tenemos un laboratorio de metagenómica” que realiza análisis de muestras de suelo para ver su flora en cuanto a microorganismos presentes, de manera que puedan aplicar los productos adecuados para potenciar el rendimiento de dicho suelo: “Hoy estamos haciendo análisis de metabolómica y de metagenómica, para hacer la caracterización de ese suelo y adaptar el tratamiento, y estamos desarrollando las líneas de producción. Lo difícil no es producir, sino saber qué es lo que funciona, ya que un organismo aislado, aunque no haga nada, él mismo sirve de alimento a los microorganismos preexistentes en el suelo, lo que va a tener un efecto positivo. Por tanto, el acierto no está en dar organismos para alimentar a los presentes, sino que el microorganismo que se incorpore, se adapte a ese suelo y colabore con los microorganismos preexistentes. Cada suelo tiene su flora de microorganismos, y aportar microorganismos sólo será eficaz si éstos se adaptan a la flora local”.
Asimismo, Jesús Fernández, el director de marketing de Fertinagro, también ve en el cambio climático y retos como la escasez hídrica, una oportunidad para que los ingenieros agrónomos y agrícolas desarrollen su profesión y aporten conocimiento a la agricultura: “La agricultura siempre ha estado al límite, con heladas, desastres… si alguien sabe adaptarse es el agricultor. Si toca poner un cultivo que extrae menos agua y especializarnos en cultivos en función de las condiciones que tenemos, yo creo que lo haremos bien. Nosotros estamos viendo que haciendo bien un PFI, tenemos menos problemas, porque potenciamos más el suelo y la planta. Entonces, si se toman buenas decisiones agronómicas, se gastan menos recursos. No es magia, es ser eficientes. Esto está ayudando mucho a los técnicos, porque hasta ahora, o trabajaban en una cooperativa, o eran vendedores, cuando en realidad son médicos de plantas. Si no se hacen las cosas bien, no se va a producir, con lo cual, yo creo que vamos a tener, por suerte, la posibilidad de que los técnicos sean capaces de hacer su trabajo de verdad: asesorar en función de las condiciones y de la normativa vigente. Esto es bueno para el sector”.
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Redacción Infoagro: Lydia Medero
