Agroseguro participa desde hoy lunes en el Congreso que cada dos años celebra la Asociación Internacional de Aseguradores de la Producción Agraria (AIAG). En esta ocasión –la 36ª edición–, las tendencias en la gestión de riesgos en relación con el clima, las nuevas tecnologías y los modelos público-privados son los principales temas de estudio y análisis durante el encuentro, que tendrá lugar hasta el miércoles, 15 de junio, en Estambul (Turquía).
El contexto de alta siniestralidad –a causa de los efectos cada vez más evidentes del cambio climático y los fenómenos meteorológicos extremos que se sufren– da especial relevancia a la celebración de este encuentro, en el que la experiencia del seguro agrario español es referencia. En el contexto internacional, se destaca el modelo de colaboración público-privada alcanzado en España, que otorga gran estabilidad al sistema, así como la amplitud de sus coberturas. Por ello es, actualmente, uno de los seguros agrarios más desarrollado del mundo y sirve como experiencia a modelos en creación y desarrollo.
Durante el Congreso, Elsa Sánchez, experta del Departamento de Consultoría y Relaciones Internacionales de Agroseguro y presidenta del Comité de Tasación de la AIAG, expondrá las actividades desarrolladas en el último bienio por este grupo de trabajo, que han estado centradas, principalmente, en fomentar el intercambio de experiencia y conocimiento en el ámbito de la gestión y valoración de daños a través de la celebración de seminarios anuales de peritación, en los que la experiencia española y de Agroseguro es muy amplia.
El 36º Congreso de la AIAG reúne a más de 225 representantes de compañías aseguradoras y reaseguradoras de 31 países, así como a representantes de las entidades gestoras de los seguros agrarios, administraciones públicas y organizaciones de productores.
Agroseguro
El sistema español de Seguros Agrarios Combinados ofrece cobertura al sector agrario frente a los daños causados en las producciones agrícolas y ganaderas por siniestros de diversa naturaleza. Las condiciones climáticas extremas y cambiantes y los perjudiciales efectos que tienen en las cosechas ponen de manifiesto la conveniencia de proteger las explotaciones con un seguro agrario que permita hacer frente a estas situaciones.