El arándano, mirtillo o blueberry presenta una vida útil comprendida entre los 15 y 20 años.
Las flores del arándano tienen una corola blanca o rosada, y se agrupan en racimos. La epidermis de los frutos están cubiertas por secreciones cerosas.
Las flores de este cultivo, aunque son hermafroditas, tienen características que especifican una baja autopolinización: se trata de flores colgantes, de manera que el polen se desprende y es incapaz de polinizar.
Los estambres de las flores del arándano establecen un círculo alrededor del pistilo hacia atrás. Únicamente una pequeña sección del estigma resulta receptivo.
Un manejo eficiente del cultivo del arándano debe basarse en que se trata de un cultivo cuya vida útil comprende entre los 15 y 20 años. Se trata de un cultivo que requiere una gran porosidad para conseguir que el sistema radicular se desarrolle de forma óptima.
La densidad de plantación resulta de gran importancia: suelen alcanzarse las 2.200 2.500 plantas/ha mediante el uso de una distancia de 1,2 a 1,5 m entre las plantas de una fila y de 2,5 a 3 metros aproximadamente entre filas.
Polinización: Los arándanos son autofértiles, pero, la polinización cruzada incrementa la producción en muchas variedades, también provoca una maduración más temprana y un gran aumento del tamaño de los frutos al depender éste del número de semillas fecundadas.
Nutrición: En las distintas etapas fenológicas de los arándanos resulta esencial realizar una buena fertirrigación. Es necesario conocer los requerimientos mínimos de la planta, cuánto y cuándo adicionar cada nutriente y qué cantidad de agua.
En cada etapa, las concentraciones de nitrógeno y potasio van variando, ya que el nitrógeno es absorbido en cantidades significativas durante la etapa de crecimiento vegetativo del cultivo, mientras, el potasio se necesita en mayor proporción durante la etapa de producción de frutos.
El nutriente más importante es el nitrógeno, siendo la formulación más recomendada el sulfato de amonio y la urea porque responde a las necesidades de la planta garantizando su crecimiento y manteniendo bajo el pH.
El fósforo y potasio son elementos igualmente importantes que la planta necesita en menor cantidad. La deficiencia de fósforo produce una coloración púrpura en la planta.
Poda: La poda de este cultivo debe realizarse tras la cosecha, y cuando se trata de variedades muy productivas puede hacerse una segunda poda durante la época fría.
Producción y recolección: La fruta en estado maduro presenta una especie de cera conocida como pruina la cual no se recomienda que sea eliminada.
El arándano consigue su máximo rendimiento a partir del 7º año de cultivo, usando material vegetal de 2 años de edad en el momento de su plantación.
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